Citando un artículo publicado el 14 de junio de 2022:
“Hay muchos “restauradores” en los Estados Unidos que no aceptan el Concilio Vaticano II”, dijo el papa Francisco en una entrevista. En declaraciones a los editores de las revistas jesuitas, criticó lo que llamó “restauracionismo” en la Iglesia, que definió como la falta de aceptación del Vaticano II, el concilio ecuménico celebrado entre 1962 y 1965.
De forma bastante providencial, hace poco encontré una página web que pretende mostrar las diferencias entre la Iglesia "antigua" y la del Vaticano II. Basándose en un libro escrito en 1966, poco después de la clausura del Concilio, se resumen los dieciséis documentos que éste emitió según sus consecuencias, en términos de la “Iglesia del futuro” frente a la “Iglesia del pasado”.
De forma bastante providencial, hace poco encontré una página web que pretende mostrar las diferencias entre la Iglesia "antigua" y la del Vaticano II. Basándose en un libro escrito en 1966, poco después de la clausura del Concilio, se resumen los dieciséis documentos que éste emitió según sus consecuencias, en términos de la “Iglesia del futuro” frente a la “Iglesia del pasado”.
Por supuesto, la Iglesia verdadera no puede ser nunca una “Iglesia del pasado”, ya que perdura hasta el fin de los tiempos, aunque a veces sólo en el corazón de los fieles, sobreviviendo a través de papas buenos y papas malos, concilios verdaderos y concilios falsos. Siempre en su esencia Una, Santa, Católica y Apostólica.
En cualquier caso, el sitio web que encontré es una apología del concilio, como lo demuestra una declaración en su página de inicio: “Los que participaron o vivieron el tiempo del Concilio sintieron una profunda y estimulante sensación de renovación y prácticamente experimentaron un nuevo Pentecostés”. La parte concreta de ese sitio que nos interesa es la página titulada “Los dieciséis documentos y sus consecuencias”.
Algunas de las acusaciones contra la “Iglesia del pasado” rozan lo sensacional. Para el documento del Vaticano II titulado “Declaración sobre las religiones no cristianas”, afirman esto de la “Iglesia del pasado”:
“Pasado: Las misiones católicas anteriormente tomaron una posición casi puramente negativa contra las religiones del mundo. Fueron vistas sólo desde el punto de vista de la conversión. La postura fue aún más fuerte en el caso de los musulmanes, a quienes se consideraba enemigos militantes de la Iglesia, y de los judíos, a quienes se consideraba un pueblo obstinado. La actitud católica estaba impregnada de una vena antisemita sin la cual no habría habido persecución de los judíos por parte de los nazis”.¡Así que fue culpa de la Iglesia anterior al Vaticano II lo que hizo que Hitler invocara el holocausto! En cuanto a la postura negativa respecto a los musulmanes, expliquen por qué no son militantes a las familias de estos mártires recientes: “Nigeria: Matanza de Católicos en la Misa de Pentecostés”
La mayoría de sus argumentos a favor de la gran “nueva Iglesia del futuro”, fueron refutados a fondo en el clásico: “En las aguas turbias del Vaticano II”, por Atila S. Guimarães. Ver mi reseña del libro Aquí.
The Shield of Faith
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