Mientras otros países creen que la solución a la dramática crisis demográfica que asola a Europa pasa por la inmigración, Hungría considera que se debe aumentar el ratio de nacimientos.
En 2011, Orbán comenzó a imponer deducciones fiscales a las familias que varían en función del número de hijos y benefician a casi la mitad de los trabajadores húngaros (entre 1,4 y 1,5 millones). La cantidad decrece progresivamente: 32 euros al mes si tienes un hijo; 40 euros al mes por cada hijo si tienes 2; y 106 euros al mes por cada hijo si tienes 3 o más.
Ésta es la principal medida del Gobierno para promover la natalidad y tiene un coste aproximado de 1.000 millones de euros (el 16% del presupuesto que dedica anualmente a políticas de familia). Cabe señalar que se puede acceder a partir de la 12.ª semana de embarazo (así se reconoce la vida del no nacido) y que el incremento por número de hijos se traduce en una recompensa a los padres con más hijos.
En 2019, Hungría dictó más beneficios fiscales a través del Plan de Acción para la Protección de la Familia. “No necesitamos números, necesitamos niños húngaros”, ha repetido insistentemente Orbán en los últimos años.
Frente a la “perspectiva de género” del globalismo, puso en marcha la “perspectiva de familia”. El gasto en este tipo de políticas ha pasado de 3.400 millones de euros en 2010 a 7.900 millones de euros en 2020.
Las medidas tienen un fin complementario, parten de la base de que la sociedad húngara se asienta en el trabajo. Por ello se pone más énfasis en las políticas activas de empleo que en los beneficios sociales que conllevan estos programas. El objetivo final es que los ciudadanos, con sus habilidades y capacidades, puedan sostenerse por su propio trabajo. El empleo es la mejor política social, añade el Ejecutivo húngaro.
Préstamo sin intereses de hasta 30.000 euros a cada matrimonio
Una medida estrella impulsada por el Ejecutivo es el préstamo sin intereses de hasta 30.000 euros a cada matrimonio si la mujer tiene una edad comprendida entre 18 y 40 años. Está garantizado 100% por el Estado y debe ser devuelto en cuotas mensuales de 150 euros, con un plazo máximo de 20 años. Si el matrimonio tiene dos hijos, una tercera parte del préstamo queda perdonada. Si tiene tres hijos o más, no se devuelve nada. Alrededor del 87% de los que solicitan esta ayuda recibe la cantidad máxima (30.000 euros).
Madres exentas del pago del IRPF y ayudas a los abuelos
Otra medida -implantada en enero de 2020- es que las mujeres con cuatro o más hijos no pagan el impuesto sobre la renta (IRPF) en toda su vida. También se han construido nuevas guarderías, tal y como contemplaba el plan, y se han dado facilidades en el acceso a la vivienda.
Además, se ha concedido una ayuda para la compra de coches para familias numerosas -la cuantía del fondo ronda los 23 millones de euros y la mayor parte de los solicitantes obtiene la cantidad máxima (8.000 euros)– y otra para incentivar el interés de los abuelos en la crianza de sus nietos. Solo uno de los abuelos puede solicitarla y está pensada para ellos, no para los padres. Se solicita por nieto y la cantidad aumenta cuanto mayor sea el número de nietos. Los abuelos tienen que seguir en el mercado laboral.
La protección del matrimonio
El partido de Orbán FIDESZ hizo valer el pasado mes de diciembre su mayoría en el Parlamento y aprobó la reforma constitucional que protege la institución del matrimonio e impide la adopción por parte de parejas homosexuales, en aras de la protección de la infancia y de la defensa de la cultura cristiana.
El nuevo texto estipula que los niños deben tener un padre y una madre, y que solo pueden adoptar los matrimonios registrados como tal.
“El objetivo es proteger a los derechos de nuestros hijos”, dijo la ministra de Justicia, Judit Varga, al tiempo que manifestó que “Hungría protege la institución del matrimonio como comunidad vital formada por una decisión voluntaria entre un hombre y una mujer, y la familia como base para la supervivencia de la nación”. “La base de la relación familiar es el matrimonio y la relación entre padres e hijos. Madre es mujer, padre es hombre”, añadió.
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