HOMOFOBIA: CUANDO LA HOMOSEXUALIDAD REALMENTE COMIENZA A ASUSTAR

La expresión "homofobia" fue inventada en 1971 por el psicoanalista (y militante homosexual) George Weinberg, que interpreta el término homo, que en la jerga indica homosexuales. Cuando la definición fue "exportada" fuera de los Estados Unidos, resultó en un desastre etimológico (¿"miedo a lo que es igual a sí mismo"?). Incluso desde un punto de vista científico, el término muestra importantes deficiencias: se puede tener muchos sentimientos hacia los homosexuales, pero no está claro por qué el "miedo" debería ser el predominante.

O al menos, comenzamos a entender que quizás deberíamos comenzar a sentir un poco de miedo, considerando no sólo las medidas contra la libertad de expresión que nos gustaría introducir a nivel legislativo, sino también las formas en que los "derechos humanos" internacionalmente se han reducido a "derechos sexuales".

Tomemos como ejemplo la página de Wikipedia sobre los derechos LGBT por país o territorio, que en el transcurso de unos años se ha convertido en una especie de "observatorio mundial" sobre los derechos de los homosexuales, proponiendo una "catalogación" de cada país sobre el tema, desde África  hasta Kirguistán, pasando por San Marino a los islotes de las Islas Cook. El problema es que ninguna otra "minoría" parece tener derecho a su propia página de "derechos": la "no enciclopedicidad" se presenta tanto para los musulmanes como para los hindúes, y también para los "cienciólogos".Ni siquiera hablamos de cristianos: el anticatolicismo tiene una página incompleta y muy disputada. Dicen que hay un problema de neutralidad en los punto de vista, porque es lamentable que la página sobre "sentimientos anticatólicos" esté escrita por católicos. En resumen, son ghei.

Como si eso fuera poco, la lista de derechos humanos país por país es mucho menos precisa, contempla un número menor de naciones que la de los derechos LGBT y finalmente demuestra ser una especie de "duplicación" de este último.

Para colmo, Wikipedia también dedica una página a la heterosexualidad, es decir, "la presunción de que todos son heterosexuales o que las relaciones entre personas de diferentes sexos son la norma y, por lo tanto, superiores". OKAY. Solo para anticipar cómo será el futuro de los heterosexistas, los invito a echar un vistazo a La Agenda Heterosexual: Exponiendo los mitos, una parodia gay de los folletos contra la homosexualidad.

Todavía puede ser divertido leer oraciones como "los activistas heterosexuales planean reclutar a sus hijos en su estilo de vida" o "los heterosexuales tienen la intención de volver a penalizar eventualmente todas las libertades de expresión para hombres y mujeres homosexuales (ya está sucediendo en Zimbabwe, Nigeria y en todo el Medio Oriente donde la agenda heterosexual está muy avanzada)".

Será menos divertido cuando la nueva normalidad imponga un nuevo paradigma "homosexista", y en ese punto también estará prohibido hablar de heterofobia (¡ya está prohibido en Wikipedia!).


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