Un auto con GNC era todo el capital con el que contaba Lucas Fonteño para fundar su propia empresa. Con la ayuda de un amigo y de una página en Facebook suma clientes y satisfacciones.
Las situaciones más difíciles pueden ser terreno fértil para que broten las mejores ideas. Eso sucedió precisamente con “Taxi de Mascotas”, el emprendimiento que -literalmente- conduce Lucas Fonteño, un tucumano que perdió su trabajo y sólo contaba con un auto con GNC para emprender su propia empresa. Quien le acercó la idea fue un amigo, Diego Nofal, quien encontró numerosas dificultades para trasladar sus mascotas de Salta a Tucumán cuando decidió volver a la Provincia luego de varios años trabajando en “La Linda”.
“Me dedico desde hace un tiempo a hacer pequeñas unidades de negocios. En este caso particular Lucas estaba desocupado y lo único que tenía era su vehículo. Por otro lado, desde hace un tiempo había advertido que había un nicho para el desplazamiento de mascotas debido a que el transporte público todavía no las acepta”, contó Diego en diálogo con eltucumano.com.
Un dato no menor es que Lucas, quien realiza viajes urbanos, interurbanos y a provincias limítrofes, es fanático de los animales. “Pensé que era una buena alternativa porque los dos amamos a nuestras mascotas; en el caso de Lucas, siempre circulaba con su perro en el asiento de atrás del auto”, recuerda el periodista que creó una página en Facebook para ayudar a difundir el emprendimiento entre todos los mascoteros.
El éxito que tuvieron en la primera semana sobre ruedas los animó a sumar a Paola, quien con 43 años también estaba desempleada y buscaba una salida laboral.
Según adelantaron los integrantes de la mini-empresa, la idea es seguir creciendo pero siempre con esta misma filosofía: ofrecer una alternativa para aquellas personas que perdieron sus ingresos y, de pronto, se encontraron en la situación de emprender una nueva vida.
El servicio
El servicio
“Taxi de Mascotas” ofrece traslados dentro de la ciudad y viajes programados cuando la distancia es mayor. El diferencial con el que cuentan es que se trata de un servicio pensado exclusivamente para el bienestar del pasajero y su mascota.
“Hay taxistas que aceptan mascotas en sus vehículos pero cobran el doble de un viaje convencional y encima el cliente sabe que está haciendo una excepción en llevarlos. El viaje se convierte entonces en una experiencia tensa porque hay que estar pendiente de que no ensucie, no mordisquee, no llore o no ladre”, relató Diego.
“Nuestra intención es que las mascotas viajen de la misma manera que lo harían con su mamá o su papá para que no lleguen estresados a destino”, sintetizó. En este sentido, destacó que si bien no llevan los animales en canil, el auto sí tiene una correa que se abrocha para garantizar la seguridad de los pasajeros. Sobre el precio del servicio que ofrecen, indicó que es un poco más caro que el taxi porque se suman otros costos, como la limpieza que realizan del vehículo luego de cada viaje.
“Cuando se implementen los aumentos del servicio de transporte, nosotros ya tenemos decidido que no actualizaremos los montos porque muchas veces los traslados son a la veterinaria, donde por lo general hay que afrontar grandes costos. Queremos ofrecer una alternativa accesible para que el dueño del perro o el gato pueda realizar el viaje sólo con la preocupación del bienestar de su mascota”.
El próximo paso de "Taxi de Mascotas" será cerrar acuerdos con obras sociales y veterinarias para gestionar traslados. “Mucha gente nos pregunta si tienen que llevar una manta para evitar la baba, los pelos o los rasguños, entonces nosotros les explicamos que eso forma parte de nuestro trabajo”.
La anécdota sobre el final de la charla da cuenta de que los frutos de arriesgarse a emprender son más que palpables: “hace poco hicimos un viaje en el que el perrito nos fue lamiendo desde que salimos hasta que llegamos" cerró Diego sin antes advertir que fue "el mejor agradecimiento".
“Hay taxistas que aceptan mascotas en sus vehículos pero cobran el doble de un viaje convencional y encima el cliente sabe que está haciendo una excepción en llevarlos. El viaje se convierte entonces en una experiencia tensa porque hay que estar pendiente de que no ensucie, no mordisquee, no llore o no ladre”, relató Diego.
“Nuestra intención es que las mascotas viajen de la misma manera que lo harían con su mamá o su papá para que no lleguen estresados a destino”, sintetizó. En este sentido, destacó que si bien no llevan los animales en canil, el auto sí tiene una correa que se abrocha para garantizar la seguridad de los pasajeros. Sobre el precio del servicio que ofrecen, indicó que es un poco más caro que el taxi porque se suman otros costos, como la limpieza que realizan del vehículo luego de cada viaje.
“Cuando se implementen los aumentos del servicio de transporte, nosotros ya tenemos decidido que no actualizaremos los montos porque muchas veces los traslados son a la veterinaria, donde por lo general hay que afrontar grandes costos. Queremos ofrecer una alternativa accesible para que el dueño del perro o el gato pueda realizar el viaje sólo con la preocupación del bienestar de su mascota”.
El próximo paso de "Taxi de Mascotas" será cerrar acuerdos con obras sociales y veterinarias para gestionar traslados. “Mucha gente nos pregunta si tienen que llevar una manta para evitar la baba, los pelos o los rasguños, entonces nosotros les explicamos que eso forma parte de nuestro trabajo”.
La anécdota sobre el final de la charla da cuenta de que los frutos de arriesgarse a emprender son más que palpables: “hace poco hicimos un viaje en el que el perrito nos fue lamiendo desde que salimos hasta que llegamos" cerró Diego sin antes advertir que fue "el mejor agradecimiento".
El Tucumano
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