Científicos chinos han producido recientemente monos transgénicos mediante la introducción de un gen del cerebro humano en los animales durante su desarrollo embrionario (que produce un híbrido humano-animal). La investigación, publicada en National Science Review, (27 de marzo de 2019), concluye que “los monos transgénicos exhibieron una mejor memoria a corto plazo y un tiempo de reacción más corto en comparación con los especímenes de tipo salvaje”. Además de las mejoras cognitivas, también se observó “un desarrollo cerebral más lento, como ocurre en los humanos”, aunque el tamaño del cerebro no se vio afectado.
Los científicos esperan que al estudiar las pocas diferencias genéticas entre los humanos y algunos simios, como los chimpancés, puedan arrojar luz sobre el proceso evolutivo que nos llevó a adquirir la inteligencia que nos caracteriza.
Uno de los enfoques utilizados para estudiar estas diferencias es introducir el gen humano MCPH1, que parece estar implicado en la evolución de nuestro cerebro, en simios, para ver cuáles son sus efectos. Después de introducir el gen humano, los científicos observaron “una mejora cognitiva” en los animales. Sin embargo, el tamaño de la muestra fue muy pequeño, ya que solo se incluyeron 5 monos, lo que es una limitación para la solidez de los resultados. Los investigadores planean repetir estos experimentos con nuevos individuos y diferentes genes.
Humanizar el cerebro animal podría ser un "problema de pendiente resbaladiza"
Desde un punto de vista bioético, estos experimentos plantean varias preguntas con respecto a la conveniencia híbrida humano-animal de humanizar el cerebro animal, especialmente cuando se trata de animales tan genéticamente similares a nosotros.
“El uso de monos transgénicos para estudiar genes humanos vinculados a la evolución del cerebro es un camino muy arriesgado”, dice James Sikela, un genetista que realiza estudios comparativos de primates en la Universidad de Colorado, y agrega que este “es un problema de pendiente resbaladiza” y “no sabemos que podemos esperar a medida que se repita este tipo de investigación”.
Sin embargo, Bing Su, autor principal del estudio, cree que la introducción de uno o unos pocos genes no puede convertir a los monos en algo que no son, es decir, no será un cambio significativo.
Nuestra opinión sobre la conveniencia de la quimera humano-animal
En opinión de nuestro Observatorio, la investigación de la función de diferentes genes a través de la producción de monos híbridos humano-animal no parece ser la mejor opción, ya que el uso de este tipo de animales presenta varias limitaciones (altos costos, pequeño número de crías y tiempo de gestación). A estos debemos agregar objeciones basadas en el bienestar de los animales, ya que los monos son animales que viven confinados en el laboratorio y ser sometidos a varias pruebas puede ser un inconveniente mayor que para otros modelos animales. En particular, sin embargo, creemos que la posibilidad de atribuir características de identidad humana a animales no humanos es una preocupación bioética importante para esta línea de investigación, ya que podría dar lugar a la producción de criaturas con un estado biológico incierto. Por lo tanto, es nuestra opinión que, al menos por ahora, los cambios genéticos no deberían introducirse en animales superiores, ya que esto genera incertidumbres bioéticas.
Bioethics Observatory
Sin embargo, Bing Su, autor principal del estudio, cree que la introducción de uno o unos pocos genes no puede convertir a los monos en algo que no son, es decir, no será un cambio significativo.
Nuestra opinión sobre la conveniencia de la quimera humano-animal
En opinión de nuestro Observatorio, la investigación de la función de diferentes genes a través de la producción de monos híbridos humano-animal no parece ser la mejor opción, ya que el uso de este tipo de animales presenta varias limitaciones (altos costos, pequeño número de crías y tiempo de gestación). A estos debemos agregar objeciones basadas en el bienestar de los animales, ya que los monos son animales que viven confinados en el laboratorio y ser sometidos a varias pruebas puede ser un inconveniente mayor que para otros modelos animales. En particular, sin embargo, creemos que la posibilidad de atribuir características de identidad humana a animales no humanos es una preocupación bioética importante para esta línea de investigación, ya que podría dar lugar a la producción de criaturas con un estado biológico incierto. Por lo tanto, es nuestra opinión que, al menos por ahora, los cambios genéticos no deberían introducirse en animales superiores, ya que esto genera incertidumbres bioéticas.
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