viernes, 27 de septiembre de 2019

INVIERNO DEMOGRÁFICO EN EUROPA

Europa no cumple con los niveles de reemplazo generacional, que es probablemente uno de los problemas sociales más graves en esta parte del mundo. Nunca ha estado más justificado asignar a Europa el nombre clásico de "el viejo continente".

Por Justo Aznar

A menudo se dice que algunos países se han visto inmersos en un preocupante invierno demográfico en Europa con consecuencias sociales impredecibles. ¿Pero es esto cierto o es una visión catastrófica de mentes deprimidas?

Ahora tenemos información para que cada persona pueda sacar sus propias conclusiones individualmente, después de que la oficina de estadística de la Unión Europea publicara los datos de Eurostat. Es decir, datos confiables, posiblemente no relacionados con ninguna tendencia ideológica. Vamos a reproducir algunos de estos a continuación.

La tasa de fertilidad necesaria para un reemplazo generacional adecuado es 2.1 nacimientos vivos por mujer, cuando la tasa de fertilidad total en Europa es 1.59 nacimientos por mujer en 2017, con una tendencia constante a la baja. Un verdadero invierno demográfico en Europa

La primera estadística que llama nuestra atención es que nacieron menos niños en Europa en 2017 (5.075 millones) que en 2016 (5.148 millones), que es una tasa de fertilidad total de 1.59 nacimientos por mujer en 2017, en comparación con 1.60 en 2016. Esto indica que la disminución se ha mantenido desde 2010, cuando la tasa de fertilidad fue de 1,62.


Invierno demográfico en Europa

A la vista de estas cifras, debe observarse que, como resultado, Europa no alcanza la tasa de fertilidad necesaria para un reemplazo generacional adecuado, que, como sabemos, se establece en 2,1 nacimientos vivos por mujer. Por lo tanto, se deben promover políticas destinadas a elevar la tasa de natalidad, entre las cuales se encuentra la regulación positiva de la inmigración.

Los países europeos con la tasa de fecundidad más alta son:

Francia, con 1.9 nacimientos por mujer

Suecia con 1.78


Irlanda con 1.77

Dinamarca con 1.75

Reino Unido con 1.74

El resto de los países europeos llegan en los últimos vagones de este tren demográfico, en el que:

Luxemburgo aparece con 1,39 nacimientos por mujer,

Portugal e Italia con 1.32,

España con 1.31

Malta con 1.26

Esta disminución global sin precedentes de las tasas de fertilidad es una gran amenaza para el reemplazo generacional con graves efectos médicos, sociales y económicos.


Consideraciones derivadas de estos datos

Existen muchas consideraciones que pueden derivarse de estos datos, pero me referiré solo a algunas de ellas.

El primero es la tasa de fecundidad más alta observada en los países del centro y norte de Europa, en comparación con los países mediterráneos.

Otro hallazgo notable es el pequeño número de segundos hijos. Por lo tanto, el 45% de los nacimientos fueron primeros hijos, el 36% fueron segundos y solo el 19% fueron terceros o hijos posteriores.

El informe también destaca cómo la maternidad se está retrasando cada vez más, ya que la edad promedio en que una mujer tuvo su primer hijo tenía 28.7 años en 2013, en comparación con los 29.1 en 2017.

Si miramos estas cifras por país, en 2017, el país que encabezaba la lista con las
 madres primerizas más jóvenes, fue Bulgaria, siendo la edad promedio de las madres primerizas 26.1 años, seguida de Rumania (26.5), Letonia (26.9), Eslovaquia (27.1), Polonia (27.3), Lituania (27.7) y Estonia (27.7). En el extremo posterior se encuentran, en orden inverso, Irlanda (30.3), Grecia (30.4), Luxemburgo (30.8), España (30.9) e Italia (31.1).

Además, en 2017, el 3% de los nacimientos en Europa fueron de mujeres de 40 años o más, aunque el porcentaje de madres adolescentes (menores de 20 años) también es notable: 5% en 2017.


El aumento de los embarazos adolescentes

Dentro de este universo demográfico, otra estadística preocupante es el aumento de embarazos adolescentes (menores de 20 años). Rumania ocupa el primer lugar europeo para este tipo de embarazos, donde el 13,9% de los bebés nacieron de madres adolescentes; estas tasas fueron del 13,8% para Bulgaria, del 9,9% para Hungría, del 9,5% para Eslovaquia, del 6,7% para Letonia y del 6,1% para el Reino Unido. En el extremo inferior aparecen Suecia con 2.0%, Luxemburgo con 1.9%, Holanda con 1.7%, Eslovenia e Italia con 1.6%, y finalmente Dinamarca con 1.5%.


Niños nacidos de madres mayores de 40 años

En el extremo opuesto, el porcentaje de niños nacidos de madres de 40 años o más, en 2017 estuvo encabezado por España con 7.4%, seguido por Italia con 7.3%, Grecia con 5.6%, Luxemburgo con 4.9%, Irlanda con 4.8% y Portugal con 4.3%

Otro detalle a destacar es el porcentaje de niños nacidos en familias numerosas, es decir, con más de 3 hijos. En la Unión Europea en su conjunto, el 81.5% de los nacimientos fueron primeros o segundos hijos, mientras que el 12.5% ​​fueron de terceros hijos y solo el 6% fueron de cuarto o hijos posteriores. Cabe destacar que esta última cifra fue del 10,3% en Finlandia, seguida de Irlanda con el 9,0%, el Reino Unido con el 8,8%, Eslovaquia con el 8,1% y Bélgica con el 8,0%.


Conclusión: Verdadero invierno demográfico en Europa

No hay duda de que se pueden extraer muchas y muy variadas conclusiones del análisis de estos datos, pero sin duda uno de los más objetivos es que Europa no cumple con los niveles de reemplazo generacional, que probablemente sea uno de los problemas sociales más serios. En esta parte del mundo, nunca ha estado más justificado asignar a Europa el nombre clásico de "el viejo continente".



Bioethics Observatory

4 comentarios:

Anónimo dijo...

De los países primeros,me temo que la aportación de la población inmigrante es la que permite aproximarse al 2 [aún insuficiente],con la excepción de Irlanda,país muy familiar y amante de los niños,aunque recién aprobaron el aborto progre y ya "se ponen al día" .De España e Italia,pasa que las niñas modernas crecen en un ambiente ANTINATALISTA pensando que una maternidad temprana y abundante será su ruina existencial,CON DINERO O SIN ÉL.En cualquier caso,NINGÚN PAÍS/GOBIERNO/ESTADO PUEDE COMPORTARSE/FUNCIONAR COMO UNA GANADERÍA con sementales,hembras y capataces.Sin una verdadera mentalidad natalista,como la que sí tenían nuestros antepasados,no hay nada que hacer.

Anónimo dijo...

Y si las mujeres modernas españolas [muy,pero que muy incómodas se sienten ellas con este tema] no quieren generar bebés,de donde van a salir,de una máquina de hacer helados??.A mí,como demografo,me llama poderosamente la atención como la natalidad europea ha ido hundiéndose paralelamente a como han ido aumentando nuestras necesidades.Comparando los españoles e italianos de 1879 con ahora, "necesitamos" una infinidad de cosas que cualquier observador puede comprobar que antes no parecían indispensables.A menudo se critican los sueldos [se han fijado en la cara de estresado/pringado que tienen los empresarios??]pero,si aumentasen,sería para niños o para "necesidades"?? [ya saben,emborracharse,el fútbol,etc,.].Alberigo CARACCIOLA.Los Boliches.[MÁLAGA]

Anónimo dijo...

Pero no todo el mundo ve claro el invierno/suicidio demográfico.Recién leí un interesante blog titulado "Hijos por decreto" .Algún progre denunciaba que Alejandro Macarron,Alberigo Caracciola [yo] y unos cuantos más son unos pamplinas que añoran el fascismo y que tienen "ocultas intenciones" [la religión??,yo le preguntaría a ese progre si los animales se reproducen por "la religión"] quieren meterle miedo a la población española.También Alejandro propuso que el ciclo universitario acabase antes para que los jóvenes formasen antes sus familias.A mi la idea no me convence demasiado pero le reconozco al señor Macarron muy buena intención.Al poco salió otro progre [son los progres enfermos mentales??,está gente siempre están con el autoodio y autodestrucción] diciendo que somos unos alarmistas,siempre metiendo miedo e insinuando mujeres conejas.Personalmente yo no tengo estudios,de estudiante suspendía hasta el recreo,ni siquiera tengo el graduado.Pero las matemáticas no fallan,cada día somos menos y más viejos y solitarios.Claro que si los progres quieren entregar España a los africanos....

Anónimo dijo...

Estoy en contra del confinamiento y muy sorprendido como casi todo el mundo se ha aborregado con esta "moda" iniciada en China.A lo largo de la historia la gente ha fallecido de enfermedades de todo tipo y no ha sido necesario comfinar a todo el mundo y criminalizar a aquel que salió a pasear.Este "Estar en contra del confinamiento" tiene mucho que ver con el invierno demográfico: vivimos en una sociedad de PETER PAN y la gente no quiere crecer ni tener hijos alegando tonterías.Tampoco asimila morir como algo natural en el ciclo vital humano.No más hay que ver, algo inédito en la historia,que una pareja contrae matrimonio y...siguen saliendo con sus pandillas los fines de semana!!.Lo de asimilar que unos nacen, otros se marchan quedó atrás con generaciones que no se hubiesen dejado humillar por una "epidemia" como él coronavirus.Alberigo CARACCIOLA.