Enseña tertuliano que el demonio remeda las operaciones de la Iglesia: “Del ingenio del diablo dice sale el estudio de trabucar la verdad que emula con los ritos de los ídolos las acciones mismas de nuestros divinos Sacramentos, Bautiza el demonio a algunos como a sus fieles, promete la remisión de los pecados señala la frente de sus soldados con sus armas, celebra el sacrificio del pan, introduce cierta imagen de resurrección”.
Es decir, así como Dios tiene un plan de Salvación para la humanidad, el demonio ha esbozado un plan para separar al hombre de Dios y siempre ese plan es una burda simulación del plan de salvación y todos sus elementos.
En el movimiento de “empoderamiento de la mujer” enarbolado por los pañuelos verdes no puedo ver más que un repugnante y mal-hecho remedo del verdadero empoderamiento de la mujer que representa María, Madre del verdadero Dios por quien se Vive.
El falso empoderamiento:
- Arrebata: creen que sólo pueden tener derechos arrebatándoselos al “patriarcado” y toda la constelación de enemigos creados por ellas mismas
- Es soberbio y egocéntrico: no pueden coexistir con nada ni nadie si no lo reducen a la inferioridad y al capricho de sus ocurrencias, para que sus derechos existan tiene que desaparecer los de cualquier otro grupo.
- Desprecia la Vida cuando esta incomoda a sus planes o sus “decisiones” con cosas innecesarias como responsabilidad o datos científicos.
- Es un mero arrebato destructivo que ve un enemigo en todo, y hasta los postes, aceras centrales de las avenidas y señales de tránsito necesitan ser destruidos porque las oprimen.
- Se piensan al nivel de Dios y toda ocurrencia que se les antoja viene elevada a nivel de derecho inalienable porque su capricho es norma de la realidad misma.
- Impone, no razona: en cuanto se les demuestra cualquier dato mínimamente racional o científico que lo contradiga, recurren a gritos, marchas y destrucción de todo lo que les estorbe.
Así el verdadero empoderamiento:
-Es otorgado: “Alégrate María pues has hallado gracia delante de Dios” (Lc. 1,30)
- Es humilde: “He aquí la esclava del señor”... “se fijó en la humillación de su esclava” (Lc 1,38 y 1,48)
- Acoge la Vida: Acepta ser la madre del Señor (Lc 1,38)
- Es poder contra el Demonio: Le aplasta la cabeza (Gn 3,15)
- Sabe confiarse de Dios: “Hijo, no tienen vino” (Jn 2,3)
- No impone sino guía: “Hagan lo que Jesús les diga” (Jn 2,15)
Es curioso ver, además, como en este movimiento y la devoción de Santa María de Guadalupe coincide el color verde, pero con motivo muy distinto.
En aquellas, el verde pareciera ser en cada pañuelo una escama de la serpiente que desde el principio buscó pervertir a la humanidad, una escama de orgullo que reclama el “derecho” a ser como dioses al margen de Dios.
En María, el verde es la bóveda celeste, casa de Dios, recordando que el único poder verdadero viene dado de lo alto, al que sabe inclinarse delante de Dios.
Así, el único y verdadero modelo de empoderamiento es María, la madre del Señor; el único camino al verdadero poder que dignifica y libera a la humanidad es el que ella nos ha mostrado: la humildad delante de nuestro Señor, y dejar que el guíe y gobierne nuestra vida con la única ley que da libertad al hombre, El Evangelio.
Santa María de Guadalupe, Reyna de México:
¡Salva nuestra patria y aumenta nuestra fe!
El Padre Matrix
Así, el único y verdadero modelo de empoderamiento es María, la madre del Señor; el único camino al verdadero poder que dignifica y libera a la humanidad es el que ella nos ha mostrado: la humildad delante de nuestro Señor, y dejar que el guíe y gobierne nuestra vida con la única ley que da libertad al hombre, El Evangelio.
Santa María de Guadalupe, Reyna de México:
¡Salva nuestra patria y aumenta nuestra fe!
El Padre Matrix
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