Además, los especialistas señalan que uno de los grandes cambios de la cara está asociado al cerebro, que permitió, gracias a la evolución, que tengamos más posibilidades expresivas, esto porque el ser humano es social, cooperativo y necesitamos esas características.
La ciencia ya sabe cómo será el rostro humano del futuro. La evolución no se detiene y la cara está en proceso de cambio. Investigadores internacionales (?) analizan qué rasgos conservará y cuáles se modificarán.
Y respecto a la pregunta de cómo será nuestra especie en unos años, uno de los expertos respondió: “Si nuestro cráneo sigue evolucionando, lo previsible sería que continuase con esa juvenilización en las proporciones craneales, lo que llevaría a una cara más reducida, con órbitas oculares proporcionalmente mayores, un mentón de menores dimensiones y una bóveda craneal más globular y desarrollada. Eso sería lo consecuente si continúa un proceso que se conoce como neotenia, que quiere decir alcanzar la adultez reteniendo características juveniles", concluye Paul Palmqvist, de la Universidad de Málaga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario