Es uno de los muchos religiosos o sacerdotes que marcan su presencia en las redes sociales publicando videos cortos tontos en Instagram o TikTok para atraer a una audiencia igualmente tonta. Supuestamente con estas payasadas están haciendo un “apostolado” y dando gloria a Nuestro Señor.
En realidad, iniciativas como ésta presentan a un Jesucristo falsificado, y en lugar de atraer a los espectadores a su Vía Crucis -único camino de salvación- apelan a la falta de seriedad de la juventud moderna y justifican indirectamente sus vicios.
De hecho, “Fray Ángel” realiza un dúo de TikTok (abajo, tres últimas filas), con una impúdica maquilladora que se ha pintado el pecho con pesebres y Reyes y luciendo un escote muy pronunciado. En otro clip se lo ve bailando con una joven en una fiesta peruana al aire libre.
No olvidemos que “Fray Ángel” pertenece a la Orden de San Francisco de la Penitencia. Parece una burla que un religioso supuestamente llamado a hacer penitencia haga todo lo contrario.
Otra consecuencia del Vaticano II.
Muchas más actuaciones afeminadas de Fray Ángel están disponibles en su página de TikTok .
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