Autor: Víctor Agustín Sequeiros, Pbro.
Editor: Javier Olivera Ravasi, Pbro.
POWER POINT 2
Francisco y el dolor de Jesús
“Un día le pregunté:
– Francisco, ¿tú de que gustas más, de consolar a Nuestro Señor, o de convertir a los pecadores para que no vayan más almas al infierno?
– Me gusta más consolar a Nuestro Señor. ¿No te fijaste cómo Nuestra Señora, en el último mes, se puso tan triste cuando dijo que no se ofendiese más a Dios Nuestro Señor, que ya está muy ofendido? Yo quiero consolar a Nuestro Señor, y después convertir a los pecadores para que no le ofendan más”.
La última confesión
“- Ven deprisa, Francisco está muy mal y dice que te quiere decir una cosa.
– Es que me voy a confesar para comulgar y morir después. Quería que me dijeses si me viste hacer algún pecado y que fueses a preguntar a Jacinta si ella me vio alguno.
– Desobedeciste alguna vez a tu madre – le respondí- cuando ella te decía que te quedases en casa y tú te escapabas para estar conmigo o para irte a esconder.
– Es verdad; tengo éste. Ahora vete a preguntar a Jacinta, si ella se acuerda de alguno más.
Me fui, y Jacinta, después de pensar un poco, me respondió:
– Escucha, dile que aún antes de aparecérsenos Nuestra Señora, robó 10 centavos a nuestro padre para comprarse una armónica en casa de José Marcos de Casa Velha: que cuando los rapaces de Aljustrel tiraron piedras a los de Boleiros, él también tiró algunas.
Cuando le di este recado de su hermana, respondió:
– Estos ya los confesé; pero vuelvo a confesarlos. Tal vez es a causa de estos pecados que yo hice, por lo que Nuestro Señor está triste. Pero yo aunque no muriese, nunca más los volvería a cometer – y poniendo las manos juntas rezó la oración ¡Oh Jesús mío, perdónanos…”
Muerte santa de Francisco
– Estos ya los confesé; pero vuelvo a confesarlos. Tal vez es a causa de estos pecados que yo hice, por lo que Nuestro Señor está triste. Pero yo aunque no muriese, nunca más los volvería a cometer – y poniendo las manos juntas rezó la oración ¡Oh Jesús mío, perdónanos…”
Muerte santa de Francisco
“Después de comulgar al día siguiente decía a su hermanita:
– Hoy soy más feliz que tú, porque tengo dentro de mi pecho a Jesús escondido. Me voy al cielo; pero allí voy a pedir mucho al Señor y a la Virgen para que pronto os lleve también allí”.
Francisco murió el 4 de Abril de 1919.
“Coitadinho do Santo Padre…”
El 20 de febrero de 1920 muere Jacinta. Antes tuvo esta visión profética:
“No sé cómo fue, yo vi al Santo Padre en una casa muy grande, de rodillas, delante de una mesa, con las manos en la cara, llorando. Fuera de la casa había mucha gente, unos le tiraban piedras, otros le maldecían y le decían muchas palabras feas. ¡Pobrecito el Santo Padre! Tenemos que pedir mucho por él.
En otra ocasión fuimos a “Lapa do Cabezo”; llegados allí, nos postramos en tierra, para rezar las oraciones del Ángel. Pasado un tiempo, Jacinta se levanta y me llama:
– ¿No ves tantas carreteras, tantos caminos y campos llenos de gente, que llora de hambre y no tienen nada para comer? ¿y al Santo Padre, en una Iglesia, delante del Inmaculado Corazón de María, rezando? ¿Y a mucha gente rezando con él?
Pasados unos días, me preguntó:
– ¿Puedo decir, que vi al Santo Padre y a toda aquella gente?
– No. ¿No ves que eso hace parte del Secreto?”
Enfermedad y sacrificios de Jacinta
- “Cuando un día llegué junto a ella, me preguntó: – ¿Ya hiciste hoy muchos sacrificios? Yo hice muchos, madre ha salido, y yo quise ir muchas veces a visitar a Francisco y no fui.
– Hoy soy más feliz que tú, porque tengo dentro de mi pecho a Jesús escondido. Me voy al cielo; pero allí voy a pedir mucho al Señor y a la Virgen para que pronto os lleve también allí”.
Francisco murió el 4 de Abril de 1919.
“Coitadinho do Santo Padre…”
El 20 de febrero de 1920 muere Jacinta. Antes tuvo esta visión profética:
“No sé cómo fue, yo vi al Santo Padre en una casa muy grande, de rodillas, delante de una mesa, con las manos en la cara, llorando. Fuera de la casa había mucha gente, unos le tiraban piedras, otros le maldecían y le decían muchas palabras feas. ¡Pobrecito el Santo Padre! Tenemos que pedir mucho por él.
En otra ocasión fuimos a “Lapa do Cabezo”; llegados allí, nos postramos en tierra, para rezar las oraciones del Ángel. Pasado un tiempo, Jacinta se levanta y me llama:
– ¿No ves tantas carreteras, tantos caminos y campos llenos de gente, que llora de hambre y no tienen nada para comer? ¿y al Santo Padre, en una Iglesia, delante del Inmaculado Corazón de María, rezando? ¿Y a mucha gente rezando con él?
Pasados unos días, me preguntó:
– ¿Puedo decir, que vi al Santo Padre y a toda aquella gente?
– No. ¿No ves que eso hace parte del Secreto?”
Enfermedad y sacrificios de Jacinta
- “Cuando un día llegué junto a ella, me preguntó: – ¿Ya hiciste hoy muchos sacrificios? Yo hice muchos, madre ha salido, y yo quise ir muchas veces a visitar a Francisco y no fui.
– Nuestra Señora vino a vernos, y dijo que muy pronto vendrá a buscar a Francisco, para llevárselo al cielo. Y a mí me preguntó si quería convertir a más pecadores. Le dije que sí. Me dijo que iría a un hospital, que ahí sufriría mucho. Que sufriese por la conversión de los pecadores, en reparación de los pecados cometidos contra el Inmaculado Corazón de María y por amor a Jesús. Le pregunté si tú vendrías conmigo. Dijo que no, esto es lo que más me cuesta. Dijo que iría mi madre a llevarme, y después quedaré allí sola.
Cuando para su hermanito llegó el momento de partir hacia el cielo, ella le hizo sus recomendaciones:
– Da muchos saludos míos a Nuestro Señor y a Nuestra Señora, y diles que sufriré todo lo que ellos quieran para reparar al Inmaculado Corazón de María y para convertir a los pecadores.
Muerte santa de Jacinta
“Hasta que llegó el día de ir a Lisboa sufrió enormemente:
– Nunca te volveré a ver, ni a mi madre, ni a mis hermanos, ni a mi padre, nunca más os volveré a ver, y después moriré sola.
– No pienses en eso- le dije un día.
– Déjame pensar, porque cuanto más pienso, más sufro; y yo quiero sufrir por amor a Nuestro Señor, y por los pecadores. Y, además, no me importa. Nuestra Señora me va a buscar para llevarme al cielo.
Una vez le pregunté:
– ¿Qué vas a hacer en el cielo?
– Voy a amar mucho a Jesús, al Inmaculado Corazón de María, pedir mucho por ti, por los pecadores, por el Santo Padre, por mis padres y hermanos y por todas esas personas que me han rogado pedir por ellas.
Cuando la madre se mostraba triste al verla tan enferma, decía:
– No se aflija, madre mía, voy al cielo, allí he de pedir mucho por usted.
La Santísima Virgen le anunciaría luego el día y la hora de su muerte”
Cuando para su hermanito llegó el momento de partir hacia el cielo, ella le hizo sus recomendaciones:
– Da muchos saludos míos a Nuestro Señor y a Nuestra Señora, y diles que sufriré todo lo que ellos quieran para reparar al Inmaculado Corazón de María y para convertir a los pecadores.
Muerte santa de Jacinta
“Hasta que llegó el día de ir a Lisboa sufrió enormemente:
– Nunca te volveré a ver, ni a mi madre, ni a mis hermanos, ni a mi padre, nunca más os volveré a ver, y después moriré sola.
– No pienses en eso- le dije un día.
– Déjame pensar, porque cuanto más pienso, más sufro; y yo quiero sufrir por amor a Nuestro Señor, y por los pecadores. Y, además, no me importa. Nuestra Señora me va a buscar para llevarme al cielo.
Una vez le pregunté:
– ¿Qué vas a hacer en el cielo?
– Voy a amar mucho a Jesús, al Inmaculado Corazón de María, pedir mucho por ti, por los pecadores, por el Santo Padre, por mis padres y hermanos y por todas esas personas que me han rogado pedir por ellas.
Cuando la madre se mostraba triste al verla tan enferma, decía:
– No se aflija, madre mía, voy al cielo, allí he de pedir mucho por usted.
La Santísima Virgen le anunciaría luego el día y la hora de su muerte”
Incorrupta
El 12 de Septiembre 1935, al trasladarse sus restos al Cementerio de Fátima, su rostro y su cuerpo se hallan perfectamente incorruptos
La heroicidad de las virtudes de Francisco y Jacinta fue declarada el 13 de Mayo de 1989, y su beatificación fue el 13 de Mayo del 2000.
Rusia, nación posesa
“…la Santísima Virgen nos dijo, que muchas naciones de la tierra desaparecerán sobre la faz de la misma, que Rusia sería el instrumento del castigo del Cielo para todo el mundo, si antes no alcanzábamos la conversión de esa pobrecita Nación” (1)
Dinamitada la capillita en 1922 por los socialistas, en 1928 se coloca la primera piedra de la construcción de la Basílica.
De Dorotea a Carmelita
25 de Octubre 1925 Lucía entra al noviciado de Sor Dorotea de Pontevedra, España.
13 de Mayo 1948, en Coimbra toma el hábito de las Carmelitas y recibe el nombre de Sor María Lucía del Corazón Inmaculado.
Diciembre de 1925 (Pontevedra)
Primera aparición del Niño Jesús a Lucía, sin revelaciones.
El 10 de Diciembre de 1925, el Niño Jesús le dice:
“Ten compasión del Corazón de tu Santísima Madre que está cubierto de espinas que los hombres ingratos en todo momento le clavan, sin haber quien haga algún acto de reparación para arrancarlas”.
La Santísima Virgen apoyando la mano sobre el hombro de Sor Lucía, agrega: “Mira, hija mía, mi Corazón cercado de espinas, que los hombres ingratos me clavan sin cesar con blasfemias e ingratitudes. Tú, al menos, procura consolarme…, y haz saber que todos aquellos que durante cinco meses en el primer Sábado se confesaren, reciban la Santa Comunión, rezaren el Santo Rosario y meditaren durante 15 minutos los Misterios del Santo Rosario en espíritu de reparación, tienen mi promesa, yo los asistiré el ultimo día con toda la Gracia necesaria para la salvación de sus Almas.” (2)
El 15 de febrero 1926, segunda aparición del Niño Jesús
– ¿Habéis revelado al Mundo aquello que la Madre del Cielo te ha mandado?
– Es verdad que la Madre Superiora por si misma no podrá, pero con mi gracia podrá todo
– Los fieles pueden confesarse cualquier otro día que preceda al primer Sábado del mes.
13 de Junio 1929: La Teofanía de Tuy
“Ten compasión del Corazón de tu Santísima Madre que está cubierto de espinas que los hombres ingratos en todo momento le clavan, sin haber quien haga algún acto de reparación para arrancarlas”.
La Santísima Virgen apoyando la mano sobre el hombro de Sor Lucía, agrega: “Mira, hija mía, mi Corazón cercado de espinas, que los hombres ingratos me clavan sin cesar con blasfemias e ingratitudes. Tú, al menos, procura consolarme…, y haz saber que todos aquellos que durante cinco meses en el primer Sábado se confesaren, reciban la Santa Comunión, rezaren el Santo Rosario y meditaren durante 15 minutos los Misterios del Santo Rosario en espíritu de reparación, tienen mi promesa, yo los asistiré el ultimo día con toda la Gracia necesaria para la salvación de sus Almas.” (2)
El 15 de febrero 1926, segunda aparición del Niño Jesús
– ¿Habéis revelado al Mundo aquello que la Madre del Cielo te ha mandado?
– Es verdad que la Madre Superiora por si misma no podrá, pero con mi gracia podrá todo
– Los fieles pueden confesarse cualquier otro día que preceda al primer Sábado del mes.
13 de Junio 1929: La Teofanía de Tuy
“Hora Santa de once a medianoche, de los jueves a los viernes (…) De repente, se iluminó toda la capilla con una luz sobrenatural y sobre el altar apareció una Cruz de luz que llegaba hasta el techo. En una luz más clara se veía, en la parte superior de la Cruz, un rostro de un Hombre y Su Cuerpo hasta la cintura. Sobre su pecho había una paloma igualmente luminosa, y clavado en la Cruz, el cuerpo de otro hombre (3).
Un poco por debajo de la cintura, suspendido en el aire, se veía un Cáliz y una Hostia grande sobre la cual caían unas gotas de Sangre que corrían a lo largo del Rostro del Crucificado y de una herida en Su pecho. Escurriendo por la Hostia, esas gotas caían dentro del Cáliz. Bajo el brazo derecho de la Cruz estaba Nuestra Señora (…) Bajo el brazo izquierdo (de la Cruz), unas grandes letras, como si fueran de agua clara cristalina, que corrían hacia el altar, formaban estas palabras: “Gracia y Misericordia”.
Comprendí que me era mostrado el misterio de la Santísima Trinidad y recibí luces sobre este misterio que no me es permitido revelar”
El tiempo del Cielo
La Santísima Virgen dice:
– “Ha llegado el momento en que Dios pide al Santo Padre que haga, en unión con todos los Obispos del mundo, la consagración de Rusia a mi Corazón Inmaculado; prometiendo salvarla por este medio. Son tantas las almas que la justicia de Dios condena por los pecados cometidos contra Mí, que vengo a pedir reparación; sacrifícate por esta intención y reza”.
A comienzos de 1930, Nuestro Señor le comunica que los dos pedidos, la Consagración de Rusia y la devoción de los primeros Sábados de mes, deben ser transmitidos al Sumo Pontífice.
El 13 de Octubre 1930, el obispo de Leiria, Mons. José da Silva, declara “dignas de crédito as visões das crianças na Cova da Iria” y permite oficialmente el culto de Nuestra Señora de Fátima.
En 2002, Juan Pablo II, incluiría la Fiesta de la Virgen de Fátima en Misal Romano certificando formalmente la autenticidad de las Apariciones (4).
El 29 de mayo de 1930 Nuestro Señor le revela: “el motivo de los cinco Sábados de mes es simple, porque son cinco especies de ofensas y bestialidades contra el Corazón
Un poco por debajo de la cintura, suspendido en el aire, se veía un Cáliz y una Hostia grande sobre la cual caían unas gotas de Sangre que corrían a lo largo del Rostro del Crucificado y de una herida en Su pecho. Escurriendo por la Hostia, esas gotas caían dentro del Cáliz. Bajo el brazo derecho de la Cruz estaba Nuestra Señora (…) Bajo el brazo izquierdo (de la Cruz), unas grandes letras, como si fueran de agua clara cristalina, que corrían hacia el altar, formaban estas palabras: “Gracia y Misericordia”.
Comprendí que me era mostrado el misterio de la Santísima Trinidad y recibí luces sobre este misterio que no me es permitido revelar”
El tiempo del Cielo
La Santísima Virgen dice:
– “Ha llegado el momento en que Dios pide al Santo Padre que haga, en unión con todos los Obispos del mundo, la consagración de Rusia a mi Corazón Inmaculado; prometiendo salvarla por este medio. Son tantas las almas que la justicia de Dios condena por los pecados cometidos contra Mí, que vengo a pedir reparación; sacrifícate por esta intención y reza”.
A comienzos de 1930, Nuestro Señor le comunica que los dos pedidos, la Consagración de Rusia y la devoción de los primeros Sábados de mes, deben ser transmitidos al Sumo Pontífice.
El 13 de Octubre 1930, el obispo de Leiria, Mons. José da Silva, declara “dignas de crédito as visões das crianças na Cova da Iria” y permite oficialmente el culto de Nuestra Señora de Fátima.
En 2002, Juan Pablo II, incluiría la Fiesta de la Virgen de Fátima en Misal Romano certificando formalmente la autenticidad de las Apariciones (4).
El 29 de mayo de 1930 Nuestro Señor le revela: “el motivo de los cinco Sábados de mes es simple, porque son cinco especies de ofensas y bestialidades contra el Corazón
Inmaculado de María:
1) La ofensa a la Inmaculada Concepción.
2) La ofensa a su Virginidad.
3) La ofensa contra su Divina Maternidad, negando reconocerla también como Madre de los hombres.
4) La ofensa de los que buscan infundir en el corazón de los niños la indiferencia y el odio en el recuerdo de Nuestra Madre Inmaculada.
5) La ofensa de aquellos que ofenden directamente a su Santa Imagen”.
2) La ofensa a su Virginidad.
3) La ofensa contra su Divina Maternidad, negando reconocerla también como Madre de los hombres.
4) La ofensa de los que buscan infundir en el corazón de los niños la indiferencia y el odio en el recuerdo de Nuestra Madre Inmaculada.
5) La ofensa de aquellos que ofenden directamente a su Santa Imagen”.
Con respecto a Rusia, Nuestro Señor promete poner fin a la persecución si el Santo Padre hiciera y ordenara hacer a todos los Obispos del Mundo un acto solemne y público de reparación y de consagración de Rusia a los Sagrados Corazones de Jesús y de María y contemporáneamente el Santo Padre prometa aprobar y recomendar la práctica de la devoción reparadora al Corazón Inmaculado de la Santísima Virgen.
Consagración de Portugal
El 13 de mayo de 1931, los Obispos portugueses consagraron solemnemente su País al Corazón Inmaculado de María “para librarlo del contagio del Comunismo” que ya asolaba España.
En Portugal, un triple milagro, fruto de la Consagración (5):
Renacimiento de la vida católica y multiplicación de las vocaciones,
Reforma política y social con la Presidencia de António de Oliveira Salazar, el cual puso en práctica un programa católico y contrarrevolucionario,
Un doble milagro de Paz: Portugal fue preservado del terror comunista que asoló España y, asimismo, de la Segunda Guerra Mundial.
Como el Rey de Francia
En Rianjo, en agosto de 1931, Nuestro Señor le confía:
“Haced saber además a mis Ministros que, habiendo escogido seguir el ejemplo del Rey de Francia en retardar la ejecución de cuanto yo tengo expresamente pedido, ellos lo seguirán también en la aflicción y en el castigo. Pero será muy tarde para recurrir a Jesús y a María (…)
Como el Rey de Francia no han querido escuchar mi pedido! Se arrepentirán y harán aquello que yo he pedido, pero será demasiado tarde: Rusia ya habrá esparcido todos sus errores provocando guerras y persecuciones contra la Iglesia. El Santo Padre tendrá mucho que sufrir”.
De 1689 …a 1789
“Has saber al Hijo Mayor de mi S.C. –hablando de nuestro Rey- que como su nacimiento temporal ha sido obtenido por la devoción a los méritos de mi Santa Infancia, igualmente él obtendrá su nacimiento de gracia y de gloria por la consagración que él hará de sí mismo a mi Corazón adorable que quiere triunfar del suyo, y por su intermedio, de los grandes de la tierra. Él quiere reinar en su palacio, ser pintado en sus estandartes y grabado en sus armas, para volverlas victoriosas de todos sus enemigos, abatiendo a sus pies estas cabezas orgullosas y soberbias a fin de volverlas (a las armas) triunfantes sobre todos los enemigos de la Santa Iglesia”.
Si Luis XIV hubiera consagrado el Reino al Sagrado Corazón, lo hubiera librado de la Revolución:
17 de junio de 1689 : Pedido de Jesucristo al Rey
17 de junio de 1789 : Comienzo de la Revolución en Francia.
En mayo de 1936, Nuestro Señor, en respuesta a una pregunta de Sor Lucía: “¿por que no quiere convertir a Rusia sin que el Papa haga la consagración?”, responde:
“Porque quiero que toda mi Iglesia reconozca esta consagración como un triunfo del Corazón Inmaculado de María, y así pueda extenderse en el mundo la devoción a mi Divino Corazón en unión al Corazón Inmaculado de María (…) Ruega mucho por el Santo Padre. El hará la consagración reclamada, pero será demasiado tarde! Igualmente el Corazón Inmaculado de María salvará a Rusia que le ha estado confiada”
“El comunismo es intrínsecamente perverso”
Pío XI, el 19 de marzo de 1937, enseña en su Encíclica Divini Redemptoris el carácter diabólico del comunismo:
«el comunismo es intrínsecamente perverso; y no se puede admitir que colaboren con él, en ningún terreno, quienes deseen salvar la civilización cristiana»
Portugal, a salvo del paraíso socialista
En 1936 los Obispos portugueses renovaron la Consagración el 13 de mayo de 1938 y suplican al Papa que consagre el mundo al Corazón Inmaculado de María.
España mártir
13 obispos asesinados.
4.184 sacerdotes seculares asesinados.
2.365 religiosos asesinados.
283 religiosas asesinadas (algunas previa violación).
Se desconoce la cifra exacta de laicos muertos por causa de su fe católica
No se registró ni una sola apostasía.
Torturas y tormentos masivos.
Templos quemados totalmente:
Valencia: 800;
Oviedo: 354;
Tortosa: 48;
Santander: 42;
Barcelona: 40;
Madrid: 30.
Templos parcialmente destruidos:
Almería: todos;
Barbastro: todos;
Ciudad Real: todos;
Ibiza: todos;
Segorbe: todos;
Tortosa: todos;
Valencia: más de 1.500;
Gerona: más de 1.000;
Vic: más de 500;
Barcelona: todos menos 10;
Cuenca: todos menos 3;
Madrid: casi todos;
Cartagena: casi todos;
Orihuela: casi todos;
Santander: casi todos;
Toledo: casi todos;
Jaén: el 95%, etc, etc.
El Milagro de la paz
Como reconoció el Cardenal Cerejeira:
“Desde que apareció Nuestra Señora de Fátima en 1917 (…) la mano invisible de Dios protegió a Portugal, librándolo del flagelo de la guerra y de la lepra del Comunismo ateo”.
La señal en el cielo
El 25 de enero de 1938 se verifica el prodigio preanunciado por la Santísima Virgen en Fátima el 13 Julio de 1917. La noche se ilumina por una luz desconocida que anuncia el inicio del gran castigo al Mundo a causa de sus pecados (6).
El 10 de Febrero 1939 muere Pío XI. Le sucede el Cardenal Pacelli, Pío XII, que había sido consagrado Obispo el día 13 de Mayo de 1917, fecha de la primera aparición de la Sma. Virgen en Fátima.
La guerra anunciada
En marzo de 1939 Nuestro Señor dice a Sor Lucía:
“Insiste de nuevo, para que sea recomendada la devoción de los primeros Sábados del mes (…) Se aproxima el momento en que el rigor de mi justicia castigara el crimen de muchas Naciones”
El 3 de Septiembre de 1939 estalla oficialmente la segunda guerra Mundial con la invasión a Polonia; en realidad la guerra ya había sido iniciada con la invasión a Austria el 12 de Marzo de 1938, bajo Pío XI. (7)
22 de Octubre 1940 (Tuy)
Nuestro Señor confía a Sor Lucía:
“la persecución contra Mi Iglesia recaerá particularmente sobre mi Vicario en la Tierra (…)
El Santo Padre podrá obtener que estos días de tribulaciones sean acortados si quisiera obedecer mi deseo de consagrarme al Corazón Inmaculado de María el Mundo entero con mención especial de Rusia”.
4.184 sacerdotes seculares asesinados.
2.365 religiosos asesinados.
283 religiosas asesinadas (algunas previa violación).
Se desconoce la cifra exacta de laicos muertos por causa de su fe católica
No se registró ni una sola apostasía.
Torturas y tormentos masivos.
Templos quemados totalmente:
Valencia: 800;
Oviedo: 354;
Tortosa: 48;
Santander: 42;
Barcelona: 40;
Madrid: 30.
Templos parcialmente destruidos:
Almería: todos;
Barbastro: todos;
Ciudad Real: todos;
Ibiza: todos;
Segorbe: todos;
Tortosa: todos;
Valencia: más de 1.500;
Gerona: más de 1.000;
Vic: más de 500;
Barcelona: todos menos 10;
Cuenca: todos menos 3;
Madrid: casi todos;
Cartagena: casi todos;
Orihuela: casi todos;
Santander: casi todos;
Toledo: casi todos;
Jaén: el 95%, etc, etc.
El Milagro de la paz
Como reconoció el Cardenal Cerejeira:
“Desde que apareció Nuestra Señora de Fátima en 1917 (…) la mano invisible de Dios protegió a Portugal, librándolo del flagelo de la guerra y de la lepra del Comunismo ateo”.
La señal en el cielo
El 25 de enero de 1938 se verifica el prodigio preanunciado por la Santísima Virgen en Fátima el 13 Julio de 1917. La noche se ilumina por una luz desconocida que anuncia el inicio del gran castigo al Mundo a causa de sus pecados (6).
El 10 de Febrero 1939 muere Pío XI. Le sucede el Cardenal Pacelli, Pío XII, que había sido consagrado Obispo el día 13 de Mayo de 1917, fecha de la primera aparición de la Sma. Virgen en Fátima.
La guerra anunciada
En marzo de 1939 Nuestro Señor dice a Sor Lucía:
“Insiste de nuevo, para que sea recomendada la devoción de los primeros Sábados del mes (…) Se aproxima el momento en que el rigor de mi justicia castigara el crimen de muchas Naciones”
El 3 de Septiembre de 1939 estalla oficialmente la segunda guerra Mundial con la invasión a Polonia; en realidad la guerra ya había sido iniciada con la invasión a Austria el 12 de Marzo de 1938, bajo Pío XI. (7)
22 de Octubre 1940 (Tuy)
Nuestro Señor confía a Sor Lucía:
“la persecución contra Mi Iglesia recaerá particularmente sobre mi Vicario en la Tierra (…)
El Santo Padre podrá obtener que estos días de tribulaciones sean acortados si quisiera obedecer mi deseo de consagrarme al Corazón Inmaculado de María el Mundo entero con mención especial de Rusia”.
Carta al Papa
A fines de 1940 Sor Lucía le escribe a Pío XII:
“Santísimo Padre: (…) Nuestro Señor promete una protección especial a nuestra Patria durante esta guerra; y que esa protección será la prueba de las gracias que concedería a las demás naciones, si, como Portugal, también se le hubiesen consagrado” (8).
Al Clero de España
El 12 de junio de 1941 Nuestro Señor, dolorido:
“Haced saber al Arzobispo de Valladolid que (…) el Señor necesita del ánimo y de sacerdotes que lo sirvan en espíritu de sacrificio por el bien de todas las almas”.
En mayo de 1943, Nuestro Señor le dice: “Deseo ardientemente que se propague en el mundo el Culto y la devoción al Corazón Inmaculado de María, porque este Corazón es el imán que atrae todas las Almas a Mí, y el fuego que irradia sobre la tierra el rayo de Mi Luz y de Mi Amor, es la fuente inagotable que hace brotar sobre la Tierra el agua viva de Mi Misericordia”.
El 5 de marzo de 1942 Nuestro Señor hace sentir a Sor Lucía que el impedimento para la Paz es el pecado y la desobediencia a su mandato de consagrar Rusia, aunque Él había movido el corazón del Sumo Pontífice a cumplirlo.
Consagración incompleta
El 31 de octubre de 1942, el Papa Pío XII, hablando por la radio, consagra el mundo al Inmaculado Corazón de María (9).
Sor Lucía escribe: “El Señor ha agradecido la consagración del Mundo de Octubre de 1942 al Corazón Inmaculado de María, aunque fue incompleta según su pedido; promete igualmente poner rápido fin a la guerra. La conversión de Rusia en cambio no ocurrirá por ahora”.
La escritura del Tercer Secreto
En el verano de 1943 Sor Lucía se enferma gravemente. Monseñor da Silva le da la orden de escribir la tercera parte del secreto, pero por más de dos meses Sor Lucía no encuentra la fuerza para hacerlo, aunque podía escribir sin problemas cualquier otra cosa: “Este fenómeno que me impide poner por escrito el tercer secreto no es debido a causas naturales” (10).
La visión del 3 de enero de 1944
“Sentí entonces una mano amiga, tierna y maternal que me tocaba el hombro; levanté los ojos y vi a mi querida Madre del Cielo:
‘No temas, Dios ha querido probar tu obediencia; estate en paz y escribe lo que te piden, pero no lo que te ha sido dado a comprender de su significado’. Una vez que lo hayas escrito, colócalo en un sobre, ciérralo y escóndelo y escribe en su exterior que no podrá ser abierto hasta 1960, por el Cardenal Patriarca de Lisboa o por el Señor Obispo de Leiría’
Y sentí mi espíritu inundado por una luz misteriosa que es Dios, y en Él he visto y oído: la punta de la lanza como una llama que se desprende, que toca el eje de la Tierra y ella tiembla: montañas, ciudades, países y pueblos con sus habitantes quedan sepultados. El mar, los ríos y las nubes salen de sus límites, desbordan, inundan y arrastran consigo en un torbellino, casas y personas en un número que no se puede contar, es la purificación del mundo del pecado en el que se encuentra inmerso. El odio, la ambición, provocando la guerra destructiva.
Después escuché en el palpitar acelerado del corazón y en mi espíritu una voz ligera que decía: ‘en el tiempo, una sola fe, un solo bautismo, una sola Iglesia, Santa, Católica, Apostólica. ¡En la eternidad, el Cielo!’. Esta palabra ‘Cielo’ llenó mi corazón de paz y de felicidad, a tal punto que, casi sin darme cuenta, seguí repitiéndola por mucho tiempo: ¡el cielo, el cielo!” (11).
No debe confundirse la visión que Lucía tuvo el 3 de enero de 1944, sobre la llama que toca el eje terrestre, con el secreto revelado el 13 de julio de 1917 y cuya tercera parte recién pudo escribir a partir de ese mismo 3 de enero de 1944.
La visión sería publicada solo en 2013 por las hermanas del Carmelo de Coimbra en una biografía oficial titulada Um caminho sob o olhar de Maria.
El Nuevo Orden contra España
Terminada la guerra, los vencedores se reparten el mundo y declaran a España un peligro para Europa y retiran sus embajadores.
Sin embargo la grave amenaza pudo ser afrontada con la victoria de la España Cristiana. Por segunda vez se ha salvado España del peligro comunista. El 12 de Octubre 1954 Franco consagra a la Nación Española al Corazón Inmaculado de María.
El 22 de Noviembre de 1946 comienza el milagro de las palomas.
El 31 de octubre de 1942, el Papa Pío XII, hablando por la radio, consagra el mundo al Inmaculado Corazón de María (9).
Sor Lucía escribe: “El Señor ha agradecido la consagración del Mundo de Octubre de 1942 al Corazón Inmaculado de María, aunque fue incompleta según su pedido; promete igualmente poner rápido fin a la guerra. La conversión de Rusia en cambio no ocurrirá por ahora”.
La escritura del Tercer Secreto
En el verano de 1943 Sor Lucía se enferma gravemente. Monseñor da Silva le da la orden de escribir la tercera parte del secreto, pero por más de dos meses Sor Lucía no encuentra la fuerza para hacerlo, aunque podía escribir sin problemas cualquier otra cosa: “Este fenómeno que me impide poner por escrito el tercer secreto no es debido a causas naturales” (10).
La visión del 3 de enero de 1944
“Sentí entonces una mano amiga, tierna y maternal que me tocaba el hombro; levanté los ojos y vi a mi querida Madre del Cielo:
‘No temas, Dios ha querido probar tu obediencia; estate en paz y escribe lo que te piden, pero no lo que te ha sido dado a comprender de su significado’. Una vez que lo hayas escrito, colócalo en un sobre, ciérralo y escóndelo y escribe en su exterior que no podrá ser abierto hasta 1960, por el Cardenal Patriarca de Lisboa o por el Señor Obispo de Leiría’
Y sentí mi espíritu inundado por una luz misteriosa que es Dios, y en Él he visto y oído: la punta de la lanza como una llama que se desprende, que toca el eje de la Tierra y ella tiembla: montañas, ciudades, países y pueblos con sus habitantes quedan sepultados. El mar, los ríos y las nubes salen de sus límites, desbordan, inundan y arrastran consigo en un torbellino, casas y personas en un número que no se puede contar, es la purificación del mundo del pecado en el que se encuentra inmerso. El odio, la ambición, provocando la guerra destructiva.
Después escuché en el palpitar acelerado del corazón y en mi espíritu una voz ligera que decía: ‘en el tiempo, una sola fe, un solo bautismo, una sola Iglesia, Santa, Católica, Apostólica. ¡En la eternidad, el Cielo!’. Esta palabra ‘Cielo’ llenó mi corazón de paz y de felicidad, a tal punto que, casi sin darme cuenta, seguí repitiéndola por mucho tiempo: ¡el cielo, el cielo!” (11).
No debe confundirse la visión que Lucía tuvo el 3 de enero de 1944, sobre la llama que toca el eje terrestre, con el secreto revelado el 13 de julio de 1917 y cuya tercera parte recién pudo escribir a partir de ese mismo 3 de enero de 1944.
La visión sería publicada solo en 2013 por las hermanas del Carmelo de Coimbra en una biografía oficial titulada Um caminho sob o olhar de Maria.
El Nuevo Orden contra España
Terminada la guerra, los vencedores se reparten el mundo y declaran a España un peligro para Europa y retiran sus embajadores.
Sin embargo la grave amenaza pudo ser afrontada con la victoria de la España Cristiana. Por segunda vez se ha salvado España del peligro comunista. El 12 de Octubre 1954 Franco consagra a la Nación Española al Corazón Inmaculado de María.
El 22 de Noviembre de 1946 comienza el milagro de las palomas.
El 30 y 31 de Octubre, así como el 1 y el 8 de Noviembre de 1950 se repite el milagro de la danza del sol. El prodigio es visto exclusivamente por el Papa Pío XII en el jardín del Vaticano.
Ese 1° de Noviembre, Pío XII proclamó el Dogma de la Asunción de la Santísima Virgen al Cielo.
Segunda Consagración de Pío XII
En mayo de 1952, la Santísima Virgen le dice: “Haced saber al Santo Padre que espero siempre la consagración de Rusia a mi Corazón Inmaculado, sin esta consagración, Rusia no se convertirá más ni el Mundo podrá ver la Paz”.
El 7 de Julio 1952 Pío XII consagra Rusia (12) al Corazón Inmaculado de María. Sin embargo no fueron cumplidas todas las condiciones exigidas:
-No fue hecha explícita referencia a la devoción reparadora de los cinco primeros sábados del mes;
-el acto solemne de reparación no estuvo explícitamente hecho;
-el Papa no ordenó a todos los Obispos del Mundo unirse a él en este acto de consagración.
Ese mismo mes, Sor Lucía escribe: “Estoy dolorida porque la consagración de Rusia no ha sido hecha aún como la Santísima Virgen la había pedido”.
Lágrimas en Siracusa
Del 29 de Agosto al 1 de Septiembre de 1953, en Siracusa, una estatuilla de la Santísima Virgen con su Corazón Inmaculado llora sin dejar mensajes.
El Arzobispo: “Las lágrimas de la Santísima Virgen parecen dirigir a todos nosotros un reproche, un grave presagio”.
Pío XII: “¿Comprenderán los hombres el significado misterioso de estas lagrimas?”.
POWER POINT 2
NOTAS AL PIE
(1). Sor Lucía, al padre Agustín Fuentes, 1957
(2). El 17 de diciembre de 1927, Jesús le dice: “Fui junto do Sacrário perguntar a Jesus como satisfaria o pedido que me era feito, porque a origem da devoção ao Imaculado Coração de Maria estava encerrada no segundo Segredo que a Santíssima Virgem me tinha confiado. Jesus, com voz clara, Fez-me ouvir estas Palavras: -Minha filha, escreve o que te pedem; e todo o que te revelou a SS.ma Virgem, na aparição em que falou desta devoção, escreve-o também; quanto ao resto do Segredo, continua o silêncio”. Morlier destaca que el “resto” es justamente la tercera parte, donde se introduce un nuevo tema, distinto del de la devoción, LA FE. (http://www.virgo-maria.org/D-3eme_secret_de_Fatima/documents_fatima/2005-11-18-Refutation-CRC-Avrille.pdf)
(3). Las palabras de la Hermana Lucía fueron citadas por Frère Michel de la Sainte Trinité, The Whole Truth about Fatima, Vol II: The Secret and the Church, pp.462-465. Cf. también Memórias e Cartas da Irmã Lúcia, editadas por el padre António Maria Martins (Porto, 1973), pp. 463-465.
(4). http://www.santuario-fatima.pt/portal/index.php?id=1311
(5). Carta Pastoral Colectiva para o Jubileu das Aparições em 1942, Merv. XX’s, p. 338; citado en Frère Michel de la Sainte Trinité, Ibid., Vol. II, p. 410.
(6). Cf. Da Fonseca-Jimenz, Luis Gonzaga. Las maravillas de Fátima. Madrid, Ed. Sol de Fátima, 1990, p. 295: Sor Lucía: “Si estudiasen bien todos los detalles de este fenómeno, sabrían que no era ni podía ser una aurora boreal”.
(7). Cf. Da Fonseca-Jimenz, Luis Gonzaga. Las maravillas de Fátima. Madrid, Ed. Sol de Fátima, 1990, p. 295.
(8). Cf. Novos Documentos de Fátima (editado por el padre António María Martins, S. J., Livraria AA.II., Porto 1984) p. 248.
(9). Em 1935, Nuestro Señor se la había aparecido a Alexandrina da Costa pidiendo la consagración del mundo para acortar la guerra.
(10). Cf. Frère François Marie des Anges. Soeur Lucie, confidente du Coeur Immaculé de Marie. Saint-Parres-Les-Vaudes, France. CRC, 2014, pp. 288-289.
(11). La cita de sor Lucía está tomada de la biografía publicada por las hermanas del Carmelo de Coimbra en 2013: Um caminho sob o olhar de Maria. Coimbra, Ed. Carmelo, 2013, 493 pp.
(12). Esta segunda fue por pedido de los Rusos blancos exilados, que antes habían sabido por sor Lucía que Rusia no había sido mencionada en la primera consagración, y que por eso no se producía la conversión.
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El 7 de Julio 1952 Pío XII consagra Rusia (12) al Corazón Inmaculado de María. Sin embargo no fueron cumplidas todas las condiciones exigidas:
-No fue hecha explícita referencia a la devoción reparadora de los cinco primeros sábados del mes;
-el acto solemne de reparación no estuvo explícitamente hecho;
-el Papa no ordenó a todos los Obispos del Mundo unirse a él en este acto de consagración.
Ese mismo mes, Sor Lucía escribe: “Estoy dolorida porque la consagración de Rusia no ha sido hecha aún como la Santísima Virgen la había pedido”.
Lágrimas en Siracusa
Del 29 de Agosto al 1 de Septiembre de 1953, en Siracusa, una estatuilla de la Santísima Virgen con su Corazón Inmaculado llora sin dejar mensajes.
El Arzobispo: “Las lágrimas de la Santísima Virgen parecen dirigir a todos nosotros un reproche, un grave presagio”.
Pío XII: “¿Comprenderán los hombres el significado misterioso de estas lagrimas?”.
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NOTAS AL PIE
(1). Sor Lucía, al padre Agustín Fuentes, 1957
(2). El 17 de diciembre de 1927, Jesús le dice: “Fui junto do Sacrário perguntar a Jesus como satisfaria o pedido que me era feito, porque a origem da devoção ao Imaculado Coração de Maria estava encerrada no segundo Segredo que a Santíssima Virgem me tinha confiado. Jesus, com voz clara, Fez-me ouvir estas Palavras: -Minha filha, escreve o que te pedem; e todo o que te revelou a SS.ma Virgem, na aparição em que falou desta devoção, escreve-o também; quanto ao resto do Segredo, continua o silêncio”. Morlier destaca que el “resto” es justamente la tercera parte, donde se introduce un nuevo tema, distinto del de la devoción, LA FE. (http://www.virgo-maria.org/D-3eme_secret_de_Fatima/documents_fatima/2005-11-18-Refutation-CRC-Avrille.pdf)
(3). Las palabras de la Hermana Lucía fueron citadas por Frère Michel de la Sainte Trinité, The Whole Truth about Fatima, Vol II: The Secret and the Church, pp.462-465. Cf. también Memórias e Cartas da Irmã Lúcia, editadas por el padre António Maria Martins (Porto, 1973), pp. 463-465.
(4). http://www.santuario-fatima.pt/portal/index.php?id=1311
(5). Carta Pastoral Colectiva para o Jubileu das Aparições em 1942, Merv. XX’s, p. 338; citado en Frère Michel de la Sainte Trinité, Ibid., Vol. II, p. 410.
(6). Cf. Da Fonseca-Jimenz, Luis Gonzaga. Las maravillas de Fátima. Madrid, Ed. Sol de Fátima, 1990, p. 295: Sor Lucía: “Si estudiasen bien todos los detalles de este fenómeno, sabrían que no era ni podía ser una aurora boreal”.
(7). Cf. Da Fonseca-Jimenz, Luis Gonzaga. Las maravillas de Fátima. Madrid, Ed. Sol de Fátima, 1990, p. 295.
(8). Cf. Novos Documentos de Fátima (editado por el padre António María Martins, S. J., Livraria AA.II., Porto 1984) p. 248.
(9). Em 1935, Nuestro Señor se la había aparecido a Alexandrina da Costa pidiendo la consagración del mundo para acortar la guerra.
(10). Cf. Frère François Marie des Anges. Soeur Lucie, confidente du Coeur Immaculé de Marie. Saint-Parres-Les-Vaudes, France. CRC, 2014, pp. 288-289.
(11). La cita de sor Lucía está tomada de la biografía publicada por las hermanas del Carmelo de Coimbra en 2013: Um caminho sob o olhar de Maria. Coimbra, Ed. Carmelo, 2013, 493 pp.
(12). Esta segunda fue por pedido de los Rusos blancos exilados, que antes habían sabido por sor Lucía que Rusia no había sido mencionada en la primera consagración, y que por eso no se producía la conversión.
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