Se ha puesto de moda entre artistas y famosos, y cada vez son más los que se apuntan a tener un hijo pagando a una madre de alquiler para que preste su vientre con ese objeto, eso sí, a un buen precio.
El último en apuntarse a esa paternidad ‘por encargo’ ha sido Miguel Bosé, quien a sus 55 años ha seguido el ejemplo de su amigo Ricky Martín y se ha convertido en ‘papito’ por partida doble, al anunciar a través de Twitter el nacimiento de dos niños gemelos de una madre de alquiler arrendada en Estados Unidos.
La noticia saltó a los medios a última hora de este martes, 26 de abril, después de que en el programa ‘Sálvame’ de Tele 5 la adelantara con reservas el tertuliano Kiko Matamoros, asiduo en los programas catalogados como ‘telebasura’.
“Queridos tod@s, tengo una buenísima noticia que contaros: he sido papá de dos niños preciosos que ayer cumplieron un mes. Se llaman Diego y Tadeo. Estamos ya en casa y en buena salud. ¡Soy el hombre más feliz de la tierra!”, tutiteó Bosé.
La conexión entre el cantante español y el portorriqueño es muy grande, como señala otra íntima amiga de Bosé, Mercedes Milá, quien ha declarado que “quizá el camino abierto por su amigo Ricky Martin, las cosas que le habrá contado, los sentimientos que habrá escuchado, han hecho que se decidiera y fuera a por ese hijo que siempre dijo que quería”.
Vientre de alquiler, sólo para privilegiados
Pero, al margen de cuestiones éticas, no hay que olvidar que estas técnicas aplicadas a vientres de alquiler sólo están al alcance de bolsillos repletos de dinero, y, en el caso de los españoles que han recurrido a ellas, el precio se incrementa al tener que buscar madres de alquiler en el extranjero, generalmente en California, un Estado con unas leyes mucho más permisivas que en España.
Por ejemplo, en el caso de la baronesa Tita Cervera, en su momento se llegó a estimar el proceso de su maternidad en 90.000 euros, entre los que se incluían las minutas que tuvo que pagar a la madre biológica, que generalmente se lleva el 25% del total.
Así, según la legislación vigente en España, Bosé no podría haber adoptado a los gemelos, ya que la Ley de Reproducción Asistida prohíbe expresamente la maternidad subrogada.
Uno de los privilegiados pioneros en recurrir al vientre de alquiler fue el cantante Michael Jackson, al que siguieron otros conocidos artistas como Nicole Kidman, Sharon Stone, Sarah Jessica Parker (junto a Matthew Broderick), Angela Basset, Robert de Niro, Dennis Quaid, Elton John o Rufus Wainwright, entre otros.
Como escribió en su blog otra bella y rica actriz madre gracias a un vientre de alquiler, Elizabeth Banks, “el único verdadero obstáculo que he encarado en mi vida es que soy estéril. Tras años intentando quedarme embarazada sin éxito, nuestro viaje nos llevó hasta un vientre de alquiler: hacemos un ‘pastel de bebé’ y lo cocemos en el ‘horno’ de otra mujer”.
Curiosa forma de definir el proceso de gestación y felicidad que proporciona la llegada de un hijo al mundo, un proceso que, en estos casos, supone en realidad un gran negocio para la industria ‘productora’ de bebés por encargo. Una industria que suele recurrir a mujeres que necesitan dinero y que no alzarán la voz si la remuneración es escasa.
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