lunes, 20 de septiembre de 2021

AL REBELARSE CONTRA LAS OBLIGACIONES DE SU CARGO, UN PAPA CAE EN EL CISMA

Publicamos un texto del Card. Charles Journet comentando una opinión del padre Tomás Cayetano, OP, (1469-1534). Este último afirmó que un Papa que se rebela contra las obligaciones de su cargo y se niega a brindar a la Iglesia la orientación espiritual que tiene derecho a recibir de él, incurre en cisma.


Nos preguntamos si este es el caso de Francisco, que se niega a utilizar los símbolos y títulos del papado. También está reemplazando el cuidado espiritual que los fieles deben recibir de él por un “cuidado ecológico”.


Cardenal Charles Journet (1891-1975)

“1. Los teólogos de antaño (Torquemada, Cayetano, Banez), que pensaban, de acuerdo con el Decreto de Graciano (parte I, dist. XV, c. IV), que el Papa, infalible como Doctor de la Iglesia, podía sin embargo, pecar personalmente contra la fe y caer en la herejía (ver L'Eglise du Verbe Incarne, t. I, p. 596), admitió con mayor razón que el Papa podía pecar contra la caridad, incluso en la medida en que ésta constituye la unidad de la comunión eclesiástica , y así caería en cisma” (1).

“La unidad de la Iglesia, según dicen, subsiste incluso cuando muere el Papa. Por lo tanto, podría subsistir también cuando un Papa cae en cisma” (Cayetano, II-II, q. 39, a. 1, n VI).

“Se preguntan, sin embargo, de qué manera el Papa puede volverse cismático. Porque no puede separarse ni de la cabeza de la Iglesia, es decir, de sí mismo, ni de la Iglesia, porque donde está el Papa, está la Iglesia”.

“A esto, Cayetano responde que el Papa podría romper la comunión dejando de comportarse como cabeza espiritual de la Iglesia, decidiendo, por ejemplo, actuar como un mero príncipe temporal. Para salvar su libertad, huiría así de los deberes de su cargo; y si lo hiciera con pertinacia habría cisma (2). En cuanto al axioma “donde está el Papa, está la Iglesia”, se mantiene cuando el Papa se comporta como Papa y cabeza de la Iglesia; de lo contrario, la Iglesia no está en él, ni él está en la Iglesia” (Cayetano, ibid.).


“2. A veces se dice que el Papa, al no poder desobedecer, solo tiene una puerta de entrada al cisma (3). De los análisis que estamos realizando resulta, al contrario, que él también puede pecar contra la comunidad eclesiástica de dos formas:

● Rompiendo la unidad de conexión, que supondría por su parte la voluntad de evitar la acción de la gracia en cuanto sacramental, y que hace nacer la unidad de la Iglesia;

● Rompiendo la unidad de dirección, que resultaría, según el análisis penetrante de Cayetano, si se rebelara como particular contra las obligaciones de su cargo y se negara a la Iglesia (intentando excomulgar a toda la Iglesia o simplemente resolviendo, de manera deliberada, vivir como un mero Príncipe temporal) la orientación espiritual a la que ella tiene derecho a esperar de él en nombre de Aquel que es más grande que él: es decir, en el nombre de Cristo y de Dios” (4).


1) En una nota a pie de página, el Card. Journet hace la siguiente observación: “Esta posibilidad no se admite universalmente. No obstante, afirma MJ Congar, “considerado de manera puramente teórica no parece dudoso” ( Dictionnaire de Theologie Catolique, artículo 'Schisme', col. 1306). Esto es lo que enseña Suárez (De Caritate, disp. 12, secc. I, n. 2, t. XII, p. 733) ”.

2) En una nota a pie de página, el Card. Journet cita el texto latino de Cayetano, que traducimos: “La persona del Papa puede negarse a someterse a las obligaciones del cargo papal (…) Y si lo hace con pertinacia de espíritu, se volvería cismático al separarse de la unidad de la cabeza. En efecto, su persona está sujeta, ante Dios, por las leyes de su cargo” (ibid.).

3) En otra nota a pie de página, el Card. Journet cita un tema del texto de Suárez que citamos más arriba, y hace el siguiente comentario: “Según Suárez, el Papa, por lo tanto, no podría pecar contra la unidad de dirección. Pero presenta como ejemplo lo que consideramos precisamente un pecado contra la unidad de dirección”.

4) Cardenal Charles Journet, L'Eglise du Verbe Incarne, Brujas: Desclee, 1962, vol. II, págs. 839-840.


Tradition in Action



No hay comentarios: