El Santo Padre ha enviado un mensaje al II Congreso Latinoamericano sobre las vocaciones y ha señalado que la evangelización "requiere un número cada vez mayor" de sacerdotes "que respondan generosamente a la llamada de Dios" y "se entreguen de por vida a la causa del Evangelio"
Además, el Pontífice ha afirmado que "una acción misionera más incisiva" trae consigo "el aumento de las vocaciones de especial consagración" y ha recordado que "la abundancia de vocaciones" es un signo "elocuente de vitalidad eclesial", al igual que "la fuerte vivencia de la fe por parte de todos los miembros" de la comunidad.
El Papa ha asegurado que la Iglesia "tiene una dimensión vocacional" y que la vida cristiana "participa también en esta misma dimensión" porque "en el alma de cada cristiano resuena siempre de nuevo aquel 'sígueme' de Jesús a los apóstoles".
Por otra parte, Benedicto XVI ha pedido que la Iglesia intensifique la pastoral vocacional para que "los bautizados asuman su llamada a ser discípulos y misioneros de Cristo" y ha subrayado que "toda la comunidad cristiana tiene el deber de fomentar las vocaciones".
Según ha explicado el Pontífice, la vocación "es un don de Dios, una iniciativa misteriosa e inefable del Señor" que entra "en la vida de una persona" de tal forma que "la cautiva con la belleza de su amor" y suscita "una entrega total y definitiva a ese amor divino".
Por ello, el Papa ha insistido en que la Iglesia debe "vencer su autosuficiencia" e ir "con humildad al Señor" para suplicarle "que siga llamando a muchos" al sacerdocio. Según ha recordado el Pontífice, el mundo "tiene necesidad de Dios" y por eso "siempre tendrá necesidad de personas que vivan para él y que lo anuncien a los demás".
Asimismo, Benedicto XVI ha recordado a la Iglesia en Latinoamérica que es necesario "ofrecer a las jóvenes generaciones la posibilidad de abrir sus corazones a Cristo" porque es el único que "puede dar sentido y plenitud a sus vidas".
Por último, el Pontífice ha invitado a los sacerdotes que den un "testimonio fiel y alegre de la propia vocación" porque su experiencia "es un medio privilegiado para despertar en tantos jóvenes el deseo de ir tras los pasos de Cristo". Según ha sostenido Benedicto XVI, con frecuencia "la vocación divina se abre paso a través de la palabra humana o gracias a un ambiente en el que se experimenta una fe viva".
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario