El papa sostiene que “en el Concilio, la Iglesia sintió la responsabilidad de estar en el mundo como un signo vivo del amor del Padre y con la Lumen Gentium volvió a las fuentes de su naturaleza, al Evangelio”. Según el Santo Padre, “esto desplaza el eje de la concepción cristiana de cierto legalismo, que puede ser ideológico, a la Persona de Dios que se hizo misericordia en la encarnación del Hijo”.
“Algunos siguen sin comprender, o blanco o negro, aunque sea en el flujo de la vida en donde hay que discernir. El Concilio nos ha dado esto, pero los historiadores dicen que un Concilio, para que lo absorba bien el cuerpo de la Iglesia, necesita un siglo… Estamos a la mitad”, ha afirmado Bergoglio.
También ha querido recalcar que “la Iglesia existe sólo como una herramienta para comunicarse con las personas del plan misericordioso de Dios”.
Sobre las acusaciones de intentar “protestantizar” a la Iglesia católica, especialmente tras su visita a Suecia para la conmemoración de los 500 años de la Reforma, Bergoglio ha asegurado: “No me quita el sueño. Yo prosigo por el camino de quienes me precedieron, sigo el Concilio”.
Bergoglio ha considerado necesario distinguir el ‘espíritu’ con el que se dicen las opiniones: “Cuando no hay un espíritu malvado, ayuda a caminar. Otras veces se ve inmediatamente que las críticas salen de acá o de allá para justificar una postura ya asumida, no son honestas, están hechas con espíritu malvado para fomentar división”.
“Se ve inmediatamente cuando ciertos rigorismos nacen de una falta, de querer ocultar dentro de una armadura la propia y triste insatisfacción”, ha agregado.
‘El proselitismo entre los cristianos es un pecado grave’
En la entrevista, Bergoglio ha vuelto a calificar como “pecado grave” el proselitismo entre los cristianos: “El proselitismo entre los cristianos, entonces, es en sí mismo un pecado grave, porque contradice la dinámica misma de cómo volverse cristianos y seguir siéndolo. La Iglesia no es un equipo de fútbol que busca hinchas”.
“Pienso en el trabajo que después del encuentro en Lund pueden hacer juntas Cáritas y las organizaciones luteranas de caridad. (…) Ciertas maneras de contraponer las cosas de la doctrina frente a las cosas de la caridad pastoral, en cambio, no siguen el Evangelio y crean confusión”, ha añadido.
Asimismo, Francisco ha subrayado que el cáncer en la Iglesia es “glorificarse recíprocamente”: “Si uno no sabe quién es Jesús, o nunca lo ha encontrado, siempre lo puede encontrar; pero si uno está en la Iglesia, y se mueve en ella justamente en el ámbito de la Iglesia, cultiva y alimenta su hambre de domino y afirmación de sí, tiene una enfermedad espiritual, cree que la Iglesia es una realidad humana autosuficiente, en la que todo se mueve según lógicas de ambición y de poder”.
Respecto a Lutero, Bergoglio ha afirmado que en su reacción estaba el rechazo de una imagen de Iglesia como organización que podía seguir adelante sin la gracia del Señor, o considerándola algo descontado, garantizado a priori. “Y esta tentación de construir una Iglesia autoreferencial, que lleva a la contraposición y por lo tanto a la división, siempre vuelve”, señaló.
InfoVaticana
No hay comentarios:
Publicar un comentario