El juez de instrucción del Tribunal de Módena, doctor Andrea Scarpa, ha anunciado hoy que no ha aceptado la petición de sobreseimiento presentada por el Ministerio Público en el caso que enfrenta a los católicos locales con su obispo. El escándalo se refiere a una exposición de arte blasfema en la iglesia-museo de San Ignacio, en la ciudad de Carpi. La exposición, llamada “Gratia Plena”, expuso al arzobispo, que la permitió y la defendió, a su creador y a sus dos curadores, a acusaciones de insulto a los sentimientos religiosos, un delito en Italia.
Según Radio Spada, el arzobispo de Módena, Erio Castellucci (que también es obispo de Carpi), el pintor Andrea Saltini, el padre Don Carlo Bellini y una laica, Cristina Muccioli, han sido acusados de “desacato” en virtud del artículo 403 del código penal italiano. El artículo 404 estipula que quien vilipendie una religión en un lugar de culto o en un lugar público insultando objetos de culto puede ser multado. El 20 de enero de 2025 se celebrará una audiencia para tratar el caso.
Según Radio Spada, los cuatro están representados por la abogada Flavia Zuddio. Los fieles católicos que se oponen a las pinturas, entre las que se encuentra un cuadro de Cristo crucificado siendo ultrajado sexualmente después de su deposición, están representados por el abogado Francesco Minutillo.
Minutillo se regocijó de que finalmente será posible argumentar el caso, que comenzó en marzo, ante un juez.
“Por fin tendremos un juez ante el cual podremos esclarecer la verdad sobre el contenido blasfemo de la exposición celebrada en la Iglesia de Carpi”, afirmó en un comunicado de prensa. “El Ministerio Público ha llevado a cabo una investigación que consideramos insuficiente y, por este motivo, hemos solicitado numerosas investigaciones en profundidad…”
Minutillo también informó que su equipo había solicitado los registros relacionados con un ataque con cuchillo a Saltini y su cuadro más famoso. El 28 de marzo, un hombre enmascarado entró en la iglesia y luego cortó y pintó con aerosol el lienzo que representaba a Cristo desnudo. Cuando el pintor intentó intervenir, el justiciero lo hirió en el cuello antes de escapar. Según los medios italianos, Saltini recibió cuatro puntos de sutura en un hospital y luego fue dado de alta. La identidad del atacante aún se desconoce.
Otras pinturas que los fieles han encontrado ofensivas incluyen un Descendimiento (erróneamente titulado “Ascensión” por el artista) de Cristo en el que Él está semidesnudo con un mono verde brillante y quienes lo llevan solo visten ropa interior; un tríptico de la Santísima Virgen María siendo desnudada por fariseos que quieren una prueba de su virginidad, y una pintura de una María Magdalena casi desnuda acunando a un hombre aparentemente moribundo en taparrabos; esta última se llama “Noli Me Tangere”.
El 4 de marzo de 2024, el “arzobispo” Castellucci defendió la exposición. En una declaración oficial de la diócesis de Carpi, negó que alguna de las imágenes fuera blasfema o sacrílega y llegó al extremo de citar la carta de San Pablo a Tito: “Todo es puro para los puros”.
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