Otra “santa de la juventud moderna”: Sandra Sabattini (1961-1984)
¿Cómo murió ella? De camino a un "Encuentro Comunitario Papa Juan XIII".
“... En abril de 1984 se dirigía a asistir a una reunión de la Comunidad Papa Juan XXIII y luego de dejar su auto, fue atropellada por otro auto y murió en el hospital el 2 de mayo de 1984, a la edad de 22 años...” ( aquí )
El Vaticano ha tomado la iniciativa de canonizar a “santos jóvenes modernos” para dar “un modelo” a la juventud de hoy. Los “santos” que están eligiendo, si bien es posible que murieran en gracia de Dios, todos han sido plenamente cómplices de la Revolución Conciliar y la Revolución Cultural (por decir lo menos).
Cuando el papa Francisco beatificó a Carlo Acutis (1991-2006) el año pasado, estaba beatificando no solo a un joven, sino a su estilo de vida: videojuegos, zapatillas, jeans e Internet.
Ahora, se están haciendo estatuas y vitrales de los populares “bienaventurados”.
El Vaticano pretende que el mensaje de tales beatificaciones es que "¡los jóvenes de hoy también pueden convertirse en santos!"
Pero el verdadero mensaje que están dando es que la Iglesia Conciliar considera la mediocridad y la modernidad de la juventud católica de hoy igual o incluso superior a los grandes santos de antaño.
Una joven moderna que muere en un accidente automovilístico camino a una reunión del Novus Ordo aparentemente se considera más digna de beatificación que la Venerable Madre Mariana de Jesús Torres o la Venerable María de Agreda.
Estas beatificaciones (y posibles “canonizaciones” futuras) son un insulto a los verdaderos santos católicos y, en mi opinión, desacreditan el mito del falso derecho de considerar a todos los “santos” recientemente canonizados como verdaderos y dignos de veneración.
¡Rezo para que el daño que los Papas Conciliares han hecho con respecto a las canonizaciones se reconcilie en el Reino de María!
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