jueves, 11 de abril de 2019

GRUPOS GENITALES DE PRESIÓN

No sé si esta sería la denominación adecuada para toda esa ingente cantidad de grupos que dicen actuar en nombre de las personas homosexuales: grupos genitales de presión. En inglés los llamaríamos lobbies. Lobbies gay.

Por Miguel Vidal


En la más pura esencia marxista, dicen representar a todos los homosexuales... pero nadie les ha elegido.

Sus fines son políticos… pero no están sometidos a ningún control democrático, como lo están los partidos políticos.

Persiguen privilegios económicos: organización de festejos de carácter comercial, como el “orgullo”, etc., patrocinados por instituciones públicas; ventajas legales para desarrollar determinadas actividades públicas (deporte, cultura, etc.), subvenciones, etc.

Y actúan como las mafias: extorsión, amenazas, señalamiento, actos violentos de boicot, difamación, etc.

Los lobbies gay son instrumentos de poder que se saltan los mecanismos democráticos para alcanzar el poder.

Como ves, nada que ver con las personas homosexuales, a las que dicen representar y a las que solo perjudican y que como tales merecen respeto y no instrumentalización.

El último comportamiento mafioso de los grupos genitales de presión lo estamos viendo estos días en su campaña contra el obispo de Alcalá de Henares, Monseñor Reig Pla.

¿Me permites que te cuente algunas cosas sobre los lobbies gay que ellos prefieren seguir ocultando?


700.000 gays en tratamiento


Según datos de la Facultad de Derecho de la Universidad de California, hay en la actualidad setecientas mil personas homosexuales sólo en Estados Unidos que se están sometiendo voluntariamente a tratamientos para revertir su tendencia sexual.

700.000. Y lo hacen voluntariamente. Setecientos mil gays que han pedido ayuda para dejar de serlo.


Pero los lobbies gay y la izquierda los convierte en “víctimas de la homofobia”, y en verdugos a quienes les ayudan:


“Se trata de espacios de violencia donde confluyen la psiquiatría, la religión, el heteropatriarcado y la eugenesia”
En España es legal (y muy aplaudido por los grupos genitales de presión) pasar de la heterosexualidad a la homosexualidad. Pero está prohibido por la ley y severamente castigado abandonar la homosexualidad:

“Artículo 7. 3. Principios rectores en el ámbito sanitario.
d) Quedan prohibidas terapias que pretendan revertir la orientación sexual o la identidad de género de la persona, aún con el consentimiento de la misma o de sus representantes legales”
.

Asistimos al nacimiento del totalitarismo circular: se persigue y castiga a la persona que atiende el pedido de ayuda de un homosexual y le echa una mano. Pero atención a la frase: “aún con el consentimiento de la misma”. Es decir, se condena también al homosexual que quiere dejar de serlo.

¿Quién es en realidad el homófobo? ¿Y quién respeta la libertad de cada cual?

En España la ley considera “muy grave” atender a un homosexual que pide ayuda:


“Artículo 94. Infracciones.
4. Son infracciones muy graves:
c) Promover o llevar a cabo terapias de reversión de la orientación sexual o de la identidad de género. Para la comisión de esta infracción, será irrelevante el consentimiento prestado por la persona sometida a las mismas.
Las infracciones muy graves serán sancionadas con multa de 20.001 hasta 45.000 euros, y además podrá imponerse alguna o algunas de las sanciones accesorias siguientes:
a) La suspensión de actividades o servicios por un tiempo máximo de 2 años.
b) La privación de la correspondiente licencia o autorización.
c) El cierre del establecimiento abierto al público por tiempo máximo de 2 años”. (Así es la Ley mordaza LGTBI)


Los defensores de estas leyes antidemocráticas y perjudiciales para las personas homosexuales llaman “víctimas del colonialismo” a los gays que quieren dejar de serlo y piden ayuda:


“Es hora de juntar nuestras manos, nuestras voces y nuestras pieles para acabar con la violencia colonizadora contra los cuerpos que escapan de los patrones regulatorios”.


No ser gay llega a ser hasta delito para los grupos genitales de presión. Porque según ellos, lo es defender la familia natural, o la identidad masculina, o combatir la ideología de género:

“Este recrudecimiento homófobo se apoya sobre tres pilares: el enaltecimiento de la familia tradicional, la defensa de la masculinidad hegemónica y la animadversión hacia la despectivamente llamada ‘ideología de género’. Una de las más actuales y extremas formas de violencia homófoba es la continuidad del discurso biopsiquiátrico mediante las terapias de conversión gay”. (Campos de conversión)


Mentiras lobby LGTB: los tratamientos matan

Dicen los grupos genitales de presión hay “consenso científico” en que “estas terapias perjudican la salud física y mental de las personas homosexuales”. Lo que nunca dicen es de dónde sale ese consenso, cuáles son los documentos científicos que lo prueban, qué organismos reconocidos e independientes, qué estudios lo demuestran.
Los lobbies gay citan como base de su condena a las terapias de reversión un documento de 2009 titulado Report of the American Psychological Association Task Force on Appropriate Therapeutic Responses to Sexual Orientation, más usualmente denominado Task Force:

“La llamada ‘Task Force’ (o ‘el consenso’) no era un gran equipo plural de especialistas: eran 7 activistas de ideología LGTB militante reconocida, de distintas asociaciones, de los que uno era heterosexual, otro bisexual, una lesbiana y cuatro homosexuales. Esa era la ‘pluralidad’. A los psicólogos, médicos y terapeutas que realizaban terapias desde hace 30 años y estudios sobre ellas, simplemente, no se les permitió participar. Y, evidentemente, dejaron fuera estudios que no les interesaban”. (¿Cambiar la atracción al mismo sexo? ¿Consenso?)




Más mentiras del lobby LGTB: Reig Pla ataca a los gay

En un notable informe, Javier Lozano analiza la ayuda a personas homosexuales que la izquierda está denunciando estos días. Lozano recoge también los testimonios directos de numerosos gays:

“Jamás me han obligado a nada, me han recomendado, orientado o me han propuesto cosas para hacer. De hecho, soy muy rebelde, y me costaba acoger los consejos, pues siempre pongo en duda y analizo aquello que me dicen me va a ayudar. Es verdad que los lazos de amistad se van estrechando y cada vez nos fiamos más unos de otros. Nos ayudamos mutuamente y yo a mi orientadora más de una vez le he dicho que creía que se equivocaba en un planteamiento u otro. Ella con mucha humildad ha acogido la corrección o el consejo. Nos respetan muchísimo.

Me he sentido siempre tratado con mucha dignidad y respeto. Nunca me han dicho que la PMS [proyección hacia Personas del Mismo Sexo] sea una enfermedad. Es el síntoma de falta de madurez en mi masculinidad. En mi caso la falta de madurez es en forma de PMS, en el caso de otros hombres su falta de madurez masculina es vivida a través de la promiscuidad siendo adictos al sexo de múltiples maneras, o con la dificultad para el compromiso, o siendo varones muy violentos, etc.”
(¿Cómo es el acompañamiento que se da en Alcalá?)

¿Quieres descubrir más mentiras sobre la campaña lanzada por la izquierda y los lobbies gay contra Mons. Reig Pla? Lee esto: 100 personas acompañadas en Alcalá defienden a Reig Pla de la campaña LGTBI contando sus testimonios.

Gays y Papa Francisco

Llama la atención que aquello de lo acusan al obispo de Alcalá sea exactamente lo que le ha dicho el Papa a un entrevistador de la cadena tóxica:

“Si un chico que está desarrollando y los papás empiezan a ver cosas raras. Consulten por favor y vayan a un profesional y ahí se verá a qué se debe. Puede ser que no sea homosexual, que sea otra cosa”.

Te invito a ver en este video las declaraciones del Papa sobre las terapias para revertir la homosexualidad:




https://vimeo.com/album/5852146/video/328919813


Los obispos reaccionan

La durísima campaña del lobbie gay contra el obispo de Alcalá de Henares ha encontrado respuesta en la Conferencia Episcopal Española, que en esta ocasión ha reaccionado con presteza y contundencia. Uno de mis blogueros preferidos, el Padre Jorge González Guadalix, describe así la respuesta de la CEE:


“Primero. Los obispos han enseñado los dientes. Poco, pero tienen dientes y los enseñan. Bendito sea Dios.
Segundo. Denuncian la manipulación de los medios. Bien. Gracias.
Tercero. Defienden la libertad de conciencia de cada persona para afrontar su vida y pedir ayuda donde le plazca, incluida la Iglesia.
Cuarto. Afirman la libertad de la Iglesia, reconocida en la Constitución española, la Ley orgánica de libertad religiosa y los Tratados internacionales sobre derechos humanos, para ofrecer su visión de la persona y acoger y acompañar a quien libremente se acerque a ella para crecer en un desarrollo humano integral desde el anuncio del Evangelio y el amor misericordioso de Dios”
(Chapeau hoy a la Conferencia Episcopal Española)

Te deseo un buen día y mucha paciencia para sobrevivir cada día al aluvión de mentiras que cae sobre los que no estamos dispuestos a aceptar la verdad oficial como la única posible.

¡Resistiremos!

¡Si Dios quiere!


Actuall


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