El padre Gabriele Amorth ha dicho a menudo que la principal causa de posesión demoníaca son las maldiciones y que maldecir es la forma más depravada de brujería, porque implica una especie de asociación con fuerzas demoníacas.
Cualquiera que invoque una maldición ciertamente está, conscientemente o no, bajo la influencia demoníaca.
Y hay un sacramental, una medalla, que nos protege especialmente de maldiciones y hechicerías, que crecen rápidamente a medida que aumenta el ataque del demonio sobre el mundo y la gente se deshace de la moral cristiana.
Aquí hablaremos sobre la Medalla San Benito. ¿Cómo surgió, cómo se usa, qué efectos provoca en quienes la usan?
El padre Fortea afirmó enfáticamente que cualquier efecto paranormal logrado a través de una maldición producida por la magia se logra a través de la intervención de los demonios, y no como resultado de los poderes mágicos de una persona.
¿Qué hacer para neutralizar una maldición?
Fortea advierte que si una persona está realmente bajo una maldición, la única forma de eliminarla es hacer exactamente lo contrario.
Si convocaron a un demonio para hacerte daño, entonces debes invocar a Dios para que te proteja, porque el bien siempre es más fuerte que el mal. Por eso tienes que rezar el rosario, leer la Biblia, hablar con Dios todos los días, ir a misa seguido, confesarte y usar los sacramentales, pero no como amuletos o talismanes, sino como señal de que tenemos fe en la protección de Dios.
¿Qué son los sacramentales?
Los sacramentales son signos sagrados, muchas veces con materia y forma, por medio de los cuales se reciben efectos espirituales y que son actos públicos de culto y santificación. Pueden ser “cosas” o “acciones”, por la intercesión de la Iglesia (Cfr. CIC. no.1166).
Lo que estamos haciendo al usar un sacramental es aceptar la misericordia de Dios y ponernos bajo su protección, reforzando la confianza en él.
Y la principal protección sacramental contra maldiciones, brujerías y ataques satánicos es la Medalla de San Benito.
Los principales postulados de la Regla son la Pax, que implica valorar el silencio y la armonía en las relaciones internas del grupo, cultivando la paciencia y el Ora et labora, que implica que los monjes deben dedicar tanto tiempo a la oración como al trabajo físico, para su búsqueda de la santidad y el servicio a Dios.
¿Cómo surgió la Medalla San Benito?
En el año 1647, en Nattremberg en Bavaria, ciertas brujas, acusadas de haber usado sus hechizos en perjuicio de las personas de los alrededores, fueron arrestadas por las autoridades. Y confesaron que nunca podrían ejercer su poder sobre el monasterio benedictino de Metten, por algo que estaba dentro del monasterio.
¿Pero qué había en el monasterio para tal protección contra las maldiciones de las brujas?
El monasterio fue registrado y les llamó la atención varias representaciones de la Santa Cruz pintadas en la pared, que contenían una serie de extrañas letras.
Estas pinturas eran muy antiguas y habían pasado desapercibidas durante años, por esa razón nadie sabía lo que significaban para esa fecha, porque se había perdido su significado.
Y después de mucha investigación encontraron un viejo Evangelarium archivado en la biblioteca, un compendio de evangelios escrito en 1415. Allí se encontró un dibujo que representaba a San Benito sosteniendo un bastón en una mano, terminado en cruz, y un pergamino en la otra, como en la pared.
Y las palabras estaban escritas completas, que en la pintura de la pared se indicaban solo como iniciales. Era una fórmula exorcista.
¿Desde cuándo se utiliza este tipo de exorcismo?
Las investigaciones llegaron hasta los santos Mauro y Plácido, también del siglo VI, quienes realizaron milagros asociando el poder de la Santa Cruz con los méritos de su maestro San Benito.
Ellos fueron los encargados de compilar esta fórmula exorcista y más tarde sucedió que el Papa León IX (siglo XI) fue atacado por el demonio en forma de rana cuando aún era un niño. Después de meses de sufrimiento, vio una escalera brillante que parecía salir de su cama hacia el cielo.
Entonces vio un anciano venerable, vestido con hábito monástico y rodeado de una luz brillante, descendiendo por esta escalera. En su mano derecha sostenía una cruz, que estaba unida al extremo de un palo largo, como el diseño que hallaron en la pared del monasterio y en el Evangelarium. El anciano se acercó al enfermo, colocó la cruz que cargaba sobre su rostro y sobre las partes inflamadas de su cuerpo, y fue sanado.
El futuro pontífice estaba convencido de que el venerable anciano que lo sanó con el toque de la cruz era san Benito, y cuando se convirtió en Papa en 1049, rediseñó la cruz como una medalla, a la que atribuyó bendiciones e indulgencias.
La medalla de San Benito que conocemos hoy fue rediseñada en 1880 y contiene las palabras que dejaron sin poder a las brujas de Metten.
Simbología de la medalla
Imágenes de Mi Medalla
Destruye los efectos de la brujería y otras influencias diabólicas.
Obtiene la conversión de los pecadores, especialmente cuando están en peligro de muerte.
Es un vehículo para la paz interior y la sanación.
Cura las aflicciones corporales.
Protege contra tormentas y rayos.
Protege a los niños de las pesadillas, y a las madres y sus hijos durante el parto.
Quienes la lleven en el momento de la muerte estarán protegidos de todo daño.
Los fieles suelen llevar la medalla con ellos o colocarla en lugares importantes como recuerdo de su fe y fuente de protección, en casas y automóviles, especialmente detrás de las puertas.
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