Esto aturde nuestra mente.
¿Te imaginas a algún Cardenal, antes del Concilio Vaticano II, haciendo lo mismo? Por desgracia, esta no es la primera vez que Karl Marx recibe elogios del cardenal Marx. Uno se pregunta realmente cuántos, en todos los niveles del clero, piensan como él. Uno se pregunta, de hecho, si la declaración de este hombre despreciable no fue hecha exactamente para complacer a Francisco.
No debemos estar “obsesionados” con la evidente enemistad con Dios del supuesto “gran pensador”.
No debemos preocuparnos en absoluto por los innumerables millones que murieron debido a su "gran pensamiento".
Todos deberíamos convertirnos en chicos blandos del Vaticano II, esponjosos y emocionales y mirar a los marxistas como si fueran una especie de trabajadores sociales con mucho tiempo libre en sus manos.
Esto es a lo que la Iglesia en Alemania se ha reducido a sí misma: un grupo de cretinos infieles complaciendo al mundo mientras llevan una existencia extremadamente bien pagada dedicada principalmente a socavar y sabotear a la Iglesia, y a los fieles que aún permanecen, que los alimentan.
Esto es a lo que la Iglesia en Alemania se ha reducido a sí misma: un grupo de cretinos infieles complaciendo al mundo mientras llevan una existencia extremadamente bien pagada dedicada principalmente a socavar y sabotear a la Iglesia, y a los fieles que aún permanecen, que los alimentan.
El cardenal Marx no es en modo alguno un escándalo, ni una oveja negra entre ellos. Es el representante típico de esta casta.
Mundabor
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