La empresa Gillette, especialista en maquinitas de afeitar, se hace eco de la políticamente correcta “sociedad trans” y del “género fluido”, promoviendo la ideología Lgbtqi +.
Por Francesca de Villasmundo
Su último comercial, presentado el 23 de mayo, muestra a un padre que enseña a afeitarse a su hija transexual. La protagonista del video es Samson Bonkeabantu Brown, una canadiense que ha “cambiado de sexo” y cree que es un muchacho. Totalmente desconectada de la realidad de su sexo biológico, la joven Brown declara en el comercial:
“A medida que crecía, siempre me preguntaba qué tipo de hombre quería ser”
“No sólo soy yo quien está haciendo mi transición, son todos los que me rodean quienes están haciendo su transición”, continúa. “Afeitarse es sobre todo una cuestión de confianza en sí mismo”, dice su padre mientras las cuchillas de afeitar se deslizan por las mejillas de la joven.
En una publicación de Facebook, la joven transexual explicó su elección de incluir en la publicidad a su padre, porque fue “uno de sus más grandes partidarios en su transición”.
“Pude compartir un gran paso en mi vida como hombre con mi padre”.
Delirio transgénero en estado puro
“En cualquier lugar, en cualquier momento, de todos modos sucede. La primera vez que te afeites es especial”, finaliza el comercial de la marca.
Esta no es la primera vez que Gillette, una subsidiaria de la compañía comercial Procter & Gamble, cumple con los temas que son queridos por el universo políticamente correcto y progresista, “deconstructor” de identidades.
Medias-Presse
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