El perrito blanco con manchas negras despertó la solidaridad de las personas que se conmovieron al verlo firme al lado de la lápida de su fallecido amo en el cementerio de Boulogne.
Desde principios del mes de Mayo, este compañero fiel a su amo no se aleja de su tumba. Tal es así que usuarios de las redes sociales hicieron una publicación para que vuelva a encontrar una familia. Según contaron, hace días que el animal está instalado en la manzana 18 del predio. “Ayudemos a este ángel a recuperar su alegría y un hogar. Está muy triste”, pidió la vecina.
A su vez, Julian Frattini Occhi, un joven que visita el lugar para dejarle flores a su madre, comentó en las redes: “Les cuento que una vez por semana voy a visitar la tumba de mi mamá al cementerio de Boulogne. Más allá de la tristeza y el dolor personal que siento por su reciente partida, no puedo evitar sentir una mezcla de tristeza y ternura por un ser que todavía está con nosotros, un hermoso perrito de avanzada edad, que nunca abandona la tumba de quien pareció ser su dueño antes de dejar este mundo”, relató Julián.
“Cada vez que voy, está siempre ahí, sea la hora que sea y quienes trabajan ahí, me dicen que no quiere irse, así como comprobé que no quiere que lo agarren por miedo a que lo alejen de ese lugar”, continuó.
“Les cuento esto, para que quien suele ir a dicho lugar, si no le es mucha molestia, pueda colaborar dejándole un poco de alimento. El agua se le provee en un tachito, de la canilla que tiene en frente suyo. No sé cómo se llama y mi intención no es otra más que hacer que este leal y viejito Ángel, tenga un pasar más agradable hasta el día en que le toque reunirse con su extrañado amigo”, agregó.
El grupo de Facebook Red mascotera, perdidos encontrados en Capital y Gran Buenos Aires, se sumó a la convocatoria para que el perrito pueda encontrar una nuevo hogar.
“Cada vez que voy, está siempre ahí, sea la hora que sea y quienes trabajan ahí, me dicen que no quiere irse, así como comprobé que no quiere que lo agarren por miedo a que lo alejen de ese lugar”, continuó.
“Les cuento esto, para que quien suele ir a dicho lugar, si no le es mucha molestia, pueda colaborar dejándole un poco de alimento. El agua se le provee en un tachito, de la canilla que tiene en frente suyo. No sé cómo se llama y mi intención no es otra más que hacer que este leal y viejito Ángel, tenga un pasar más agradable hasta el día en que le toque reunirse con su extrañado amigo”, agregó.
El grupo de Facebook Red mascotera, perdidos encontrados en Capital y Gran Buenos Aires, se sumó a la convocatoria para que el perrito pueda encontrar una nuevo hogar.
Un hombre se ofreció a adoptarlo, pero finalmente no lo concretó. El perrito sigue en el cementerio y hay vecinos que diariamente se ocupan de llevarle comida y agua.
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