A los Obispos Católicos:
La verdad de nuestra tan lamentada posición como Iglesia está en los registros sacramentales. Esto se encuentra específicamente en el cambio de la proporción entre sacerdotes y fieles en los últimos 54 años. Esta proporción no puede ser más reveladora. Obviamente, cuanto menor es la proporción de sacerdotes por fiel, más se sirve al Cuerpo Místico de Cristo. Cuanto mayor es la proporción, más difícil es para los fieles ir a Misa, ser confesados o tener un contacto significativo con los sacerdotes.
En 1970, el año en que se introdujo la misa Novus Ordo, teníamos 59.192 sacerdotes en EE.UU. y alrededor de 52 millones de católicos. Hoy tenemos alrededor de 28.000 sacerdotes y 72 millones de católicos. Tenemos 1/3 de los sacerdotes que teníamos en 1970. Tenemos 1/3 de los sacerdotes que teníamos justo después de la inesperada innovación de la misa novus ordo. En las más de 5 décadas transcurridas desde 1970, la proporción entre sacerdotes y fieles nunca ha mejorado; sigue desplomándose.
La Iglesia Católica se encuentra en una situación desesperada. En los años 50, aproximadamente el 80% de los católicos asistían a Misa los domingos. En 1980, era alrededor del 50%. En 1990, era de alrededor del 40%, y en 2000 era de alrededor del 33%. En 2019, había caído al 20%. Actualmente, una Diócesis tiene la suerte de contar con un 8%, de los que se identifican como católicos, que asisten a la Misa dominical. Ninguna empresa deja que su principal producto siga cayendo año tras año y mucho menos década tras década. Los Obispos, como administradores de la Santa Fe, deberían reevaluar intuitivamente las consecuencias de los cambios en la Santa Misa.
Ha habido dos estudios importantes sobre la Misa Tradicional en Latín (2019 y 2020). Los fieles de la Misa Tradicional en Latín viven exactamente en la misma sociedad que sus compañeros católicos de la misa novus ordo.
La caída de los números en todo lo relacionado con la Iglesia Católica, no se debe a la podredumbre moral y teológica de la sociedad. Los fieles del Misa Tradicional en Latín van a Misa en un 97% y dan 5 veces más dinero per cápita. Estas cifras fueron revisadas y verificadas por el Dr. Froehle, que dirigió CARA, un centro nacional de investigación eclesiástica en la Universidad de Georgetown, durante muchos años.
Ustedes, como obispos, ya no pueden decir que nadie quiere la Misa Tradicional en Latín. Eso es lo que oíamos una y otra vez cuando yo estaba en el seminario a principios de 1990.
La gente no sólo quiere la Misa Tradicional en Latín, sino que saben que es la única cubierta protectora contra los asaltos de Satanás. Cualquier otra práctica religiosa está siendo demolida. Los cristianos practicantes o cualquier religión moderna, están cediendo a una no-práctica y/o a un tipo de ateísmo sin Dios.
Para mi, es nefasto insinuar que la misa del novus ordo pueda siquiera existir en el futuro. La misa novus ordo está atrapada en un túnel del tiempo de los años sesenta. Ni se parece a nuestra Liturgia Tradicional ni se acerca remotamente a ninguna prueba de realidad Eterna.
Algunos Obispos creen que un novus ordo con algo de latín es la respuesta. Quieren engatusar o engañar con la creencia de que la misa novus ordo en latín saciará a los fieles de la Misa Tradicional en Latín; pero no es así, ya que espiritualmente es una falsificación muy débil. El problema es que esta idea ya se ha probado y ha fracasado.
Diré que el novus ordo en latín es mucho mejor que el novus ordo en lengua vernácula. Sin embargo, sólo será una sangría más lenta. La misa novus ordo en latín no tiene crecimiento ni aumento de vocaciones. Sigue siendo una violación de una Tradición de más de 1.930 años de la Santa Misa, desde los Apóstoles.
¿Por qué un Prelado Católico permitiría que se cancelaran las Misas Tradicionales en Latín en su Diócesis? ¿Qué daño han hecho estas personas? ¿Dan demasiado en la colecta? ¿Se casan con demasiada frecuencia? ¿Vienen a las Misas dominicales con demasiada regularidad? ¿Tienen demasiados hijos católicos porque no practican la anticoncepción?
Sabemos que el 89% de las mujeres que asisten normalmente al novus ordo missae están de acuerdo con la anticoncepción y sólo el 2% de las mujeres de la Misa Tradicional en Latín están de acuerdo con la anticoncepción. La mentalidad anticonceptiva dominante en el novus ordo dice mucho de la atrofia que engendra. Estas misas parecen pertenecer a dos religiones diferentes.
Un Prelado en ejercicio en la Iglesia Católica no es un Vicario de Roma. Es la autoridad en su Diócesis para sus fieles. Él es quien debe decidir lo que es espiritualmente beneficioso para sus fieles. ¿Tienen casi todos ustedes miedo de la Curia Romana? Si son apartados como el Obispo Strickland, que así sea. Santo Tomás de Aquino enseña que la obediencia a las exigencias tiránicas no es sostenible. Si suficientes Obispos resisten, tienen un gran poder permaneciendo unidos en un grupo de incondicionales virtuosos.
En la Inglaterra del siglo XVI, sólo 1 obispo de 30 se resistió al rey Enrique VIII. San Juan Fisher defendió el matrimonio y la Misa en latín de Todos los Tiempos. En 1569, los Nobles de Northumberland lucharon contra la Reina Isabel I a favor de la Misa Tradicional en Latín y contra la Liturgia Anglicana Inglesa.
Nuestros exorcistas nos dicen repetidamente que los demonios odian y temen el latín. Espero que todos ustedes no sean cómplices voluntarios ni negligentes de los poderes del Infierno.
Muchos fieles llevan años dirigiendo sus propios negocios. Nunca negarían a sus clientes su producto más vendido. Eso sería un suicidio económico. Ver cómo cierran arbitrariamente la Misa Tradicional en Latín en todo el país me parece un suicidio espiritual. ¿Quiere usted, como obispo, pasar los últimos años de su episcopado presidiendo la continua hemorragia de nuestros fieles? ¿Escucha a sus fieles que aman la Misa Tradicional en Latín y su historia de fecundidad? ¿Tiene ojos para ver y oídos para oír? ¿Somos el único segmento de la Iglesia que no recibe afecto y cuidado paternal? La fecundidad de cualquier Misa debería dar fe de su veracidad o mendacidad.
Nuestros exorcistas nos dicen repetidamente que los demonios odian y temen el latín. Espero que todos ustedes no sean cómplices voluntarios ni negligentes de los poderes del Infierno.
Muchos fieles llevan años dirigiendo sus propios negocios. Nunca negarían a sus clientes su producto más vendido. Eso sería un suicidio económico. Ver cómo cierran arbitrariamente la Misa Tradicional en Latín en todo el país me parece un suicidio espiritual. ¿Quiere usted, como obispo, pasar los últimos años de su episcopado presidiendo la continua hemorragia de nuestros fieles? ¿Escucha a sus fieles que aman la Misa Tradicional en Latín y su historia de fecundidad? ¿Tiene ojos para ver y oídos para oír? ¿Somos el único segmento de la Iglesia que no recibe afecto y cuidado paternal? La fecundidad de cualquier Misa debería dar fe de su veracidad o mendacidad.
Las vocaciones al sacerdocio en las parroquias con Misa Tradicional en Latín es 6-7 veces mayor dependiendo de la Diócesis. Hasta la fecha, he estado asignado en 5 parroquias que ofrecían ambas Misas en el mismo horario dominical. La misa novus ordo tuvo exponencialmente muchos más asistentes que la Misa Tradicional en Latín en todas las parroquias. Los resultados de vocaciones fueron 15 en la Misa Tradicional en Latín a 0 en el novus ordo missae. En mis 28 años como sacerdote, he tenido 29 Directores Espirituales que han discernido el Sacerdocio o la Vida Religiosa. 28 Misa Tradicional en Latín y 1 novus ordo missae. 7 de la Misa Tradicional en Latín dejaron la formación antes de hacer sus votos perpetuos u ordenaciones. El 1 novus ordo missae fue ordenado sacerdote y luego dejó el Sacerdocio. Así que hay 21 en la Misa Tradicional en Latín y 0 en el novus ordo missae que continúan su formación o sus votos.
Por favor, cualquier Obispo que lea esto; demuéstreme que estoy equivocado sobre el crecimiento negativo del novus ordo missae y el crecimiento positivo de la Misa Tradicional en Latín donde no se machaca indiscriminadamente. Que se pongan una Misa al lado de la otra. Que decidan los fieles.
No debe haber lugar para el Egoísmo (Obispos celosos del éxito de la Misa Tradicional en Latín), no debe haber lugar para una “misa experimental” que no ha funcionado, no debe haber lugar para el Afeminamiento (la Liturgia “femenina” del novus ordo missae frente a la masculina de la Misa Tradicional en Latín) que ha socavado al Hijo del Hombre Encarnado en el Altar.
¿Por qué parece que se ignora al único sector fructífero de la Iglesia? Una vez escuché a un hombre decir que no le importaba si el sacerdote hablaba marciano mientras se reforzara la Santa Fe. El Rito Latino es el nombre de nuestra Iglesia Occidental. El latín invierte la maldición de la Torre de Babel. Nos da una lengua universal. Me parece que necesitamos más unidad, no aplastar el Espíritu de nuestros antepasados.
Padre Donald Kloster
Diócesis de Bridgeport
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