¿Por qué el Vaticano envió al obispo Josef Clemens, antiguo secretario del papa Benedicto XVI y presunto homosexual activo, como delegado papal a una abadía rica y plagada de escándalos en Austria?
Por Maike Hickson
Una investigación oficial recientemente concluida sobre las acusaciones de abusos sexuales y encubrimiento de los mismos en la abadía austriaca de Klosterneuburg ha hecho que se cuestione si el Vaticano estaba interesado en encubrir esa mala conducta monástica. En 2020, el Vaticano nombró al obispo Josef Clemens, antiguo secretario del entonces cardenal Joseph Ratzinger, como delegado papal en esta abadía.
El papa Benedicto XVI saluda a Mons. Clemens (21 de agosto de 2005.)
Clemens fue secretario del Papa Benedicto XVI y, como secretario del Consejo Pontificio para los Laicos, fue responsable de la organización de las Jornadas Mundiales de la Juventud de Colonia (2005), Sidney (2008), Madrid (2011) y Río de Janeiro (2013), así como de Cracovia (2016).
En noviembre de 2020, Clemens había sido nombrado delegado papal por el Vaticano para dirigir la abadía tras la publicación de graves acusaciones de abusos sexuales por parte de miembros de la comunidad y de encubrimiento de esos abusos por parte de la dirección de Klosterneuburg, en particular del preboste Bernhard Backovsky. En mayo de 2020, Backovsky se había retirado por problemas de salud. Había sido el preboste de la abadía durante 25 años y, por lo tanto, tiene mucha responsabilidad en lo ocurrido en ese periodo de tiempo.
Las denuncias de abusos sexuales en la abadía comenzaron a aparecer en 2017. La primera acusación se refería al canónigo W. Veix, que había abusado sexualmente, en 1993, de un menor de edad y al que posteriormente se le pidió que abandonara la abadía. Sin embargo, como demostró un informe detallado, posteriormente fue ordenado sacerdote en 1996 y continuó abusando de chicos durante muchos años (la razón de que fuera posteriormente, en 2020, laicizado).
Aunque desde la abadía de Klosterneuburg se afirmó en un primer momento no haber tenido nada que ver con este caso tras la expulsión de Veix del monasterio, los testigos han dicho que fue el preboste Backovsky quien ayudó a Veix a ordenarse sacerdote y a encontrar un puesto como tal. Además, Veix siguió viviendo durante algunos años en un apartamento propiedad del monasterio.
Como dijo a LifeSite un testigo presencial (cuyo nombre es conocido por LifeSite pero no se publicará aquí), Veix dijo una vez que "tenía a Backovsky y a su hermano en el bolsillo", añadiendo que "Backovsky es mi seguro de vida".
Dr. Floridus Röhrig
Como en el caso de Veix (el sacerdote ahora laicizado), también en este caso el preboste Backovsky está bajo sospecha de haber sabido y de no haber hecho nada para evitar más abusos o para hacer justicia. Pero desgraciadamente, después de la visita apostólica inicial, las propias investigaciones del obispo Clemens se limitaron a producir una declaración, en marzo de 2022, en la que declaraba que "la investigación recomendada por la Santa Sede ha concluido", y que ahora "es importante mirar al futuro y empezar de nuevo". El preboste Backovsky fue citado pidiendo disculpas por sus fallos. La declaración no ofrecía ninguna conclusión particular con respecto a los casos de abuso sexual que habían tenido lugar en la Abadía o lo que el preboste Backovsky hizo mal específicamente.
El comunicado explicaba que la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica del Vaticano había recomendado dicha investigación a la luz de la cuestión de cómo Backovsky había tratado los asuntos de abuso sexual. Por ello, Clemens había iniciado una investigación canónica por parte de un experto externo, que tuvo lugar en noviembre de 2021.
La declaración de marzo de 2022 continuaba así:
El obispo Clemens, en esta declaración oficial de marzo de 2022, concluye que "la investigación canónica está ahora cerrada y el pasado ha sido tratado. Después de estos tiempos tumultuosos, ahora se puede mirar al futuro afrontando nuevos retos".
¿Está realmente cerrado el caso?
Johannes Heibel, investigador de abusos sexuales en Alemania y en otros países, que ha desempeñado un papel importante en el descubrimiento del historial de abusos de Klosterneuburg, pide ahora incluso la dimisión de Clemens. Dijo a LifeSite:
Obispo Clemens: Citar a Röhrig en la homilía no fue un respaldo
Según varias fuentes, todavía no se ha producido una verdadera curación.
LifeSiteNews ha podido saber más sobre la actitud del obispo Clemens y su forma de manejar las preguntas sobre su propia conducta.
En primer lugar, LifeSite se puso en contacto con él, pidiéndole que comentara su decisión de citar al Dr. Röhrig por su nombre.
En su respuesta, el obispo Clemens afirmó que "citar a Röhrig no era un respaldo a su persona. La cita del autor de una fuente cumple con las normas académicas aplicables y no dice nada sobre su persona". Luego Clemens continuó señalando que es incorrecto afirmar que "citó positivamente" a Röhrig: "No se corresponde con la verdad que en el sermón del Delegado [Papal] el autor fue citado positivamente varias veces. Las citas o referencias no son valoraciones personales, sino referencias académicamente útiles o pruebas necesarias de las fuentes utilizadas".
Sin embargo, la mención de Röhrig por parte de Clemens en la segunda frase de su homilía sólo sirvió para presentar una traducción de Röhrig de una frase en latín, y por lo tanto seguramente se podría haber evitado, si se tuviera sensibilidad hacia las víctimas de Röhrig.
LifeSite también preguntó al obispo Clemens si su investigación canónica examinó el caso de este canónigo y si encontró que Röhrig era inocente (una posible explicación para que mencionara su nombre en su homilía).
Pero esta pregunta quedó esencialmente sin respuesta, ya que Clemens se limitó a informar sobre las normas que seguía la investigación y que él, como delegado papal, está "siguiendo, en su evaluación de los casos individuales, las percepciones y evaluaciones de los órganos responsables de la arqyidiócesis de Viena".
Es decir, no respondió a nuestra pregunta. No se pretendía la transparencia, como parece.
Esta impresión se vio reforzada cuando el 15 de mayo, LifeSite habló con el padre Michael Imlau, testigo presencial de las múltiples corrupciones que rodean a la Abadía. Él y otro sacerdote se habían reunido este mes con Clemens. Una de sus objeciones fue que Clemens ni siquiera los había entrevistado -dos testigos importantes- antes de declarar cerrada la investigación canónica (en marzo de este año).
Cuando el padre Imlau sacó a relucir el caso Röhrig y su mala conducta sexual, el obispo Clemens le dijo a Imlau que, si se había guardado silencio sobre el caso en su momento, se había hecho "para evitar daños a la Iglesia". Imlau dijo a LifeSite que el obispo Clemens también dijo que el contenido de su conversación "no debería ser compartido con la prensa".
Por lo tanto, tanto el padre Imlau como su colega sacerdote tuvieron la impresión de que todavía existe el espíritu de encubrimiento. Tanto él como otros observadores del caso Klosterneuburg son de la opinión de que el caso no debe cerrarse todavía.
Mons. Viganò: 'Hay fuertes sospechas de que Clemens es un homosexual activo'
Johannes Heibel comentó las respuestas del obispo Clemens a LifeSite de la siguiente manera: "Bueno, básicamente, no son respuestas a sus preguntas en absoluto. De forma arrogante, extremadamente arrogante, sermoneadora, típica del clero, se limita a remitirse a las normas y reglamentos y demuestra así que no ha aprendido nada".
"Al ignorar lo que los perpetradores y sus cómplices han hecho a las víctimas", continuó, "el obispo Clemens se muestra como un hombre implicado en el encubrimiento". Para Heibel, está claro que Clemens "no está interesado en ninguna investigación real ni en el esclarecimiento de los hechos ocurridos en el monasterio", tratando de evitar un mayor daño a la "ya maltrecha reputación del monasterio".
"Al no informar al público de forma exhaustiva, se une sin problemas a las filas de los encubridores", concluyó Heibel.
LifeSite también se puso en contacto con un experto en protección de menores y le presentó nuestras conclusiones. Comentó: "Toda medida sincera y todo esfuerzo honesto para investigar, abordar y prevenir los abusos debe guiarse por el principio de que la preocupación por los afectados por los abusos es la prioridad".
A la luz del daño que el obispo Clemens está añadiendo a la situación en Klosterneuburg, podría valer la pena cuestionar la decisión del Vaticano de nombrarlo delegado papal en Klosterneuburg.
El propio Clemens tiene una historia personal controvertida. Tras haber sido secretario personal del entonces cardenal Joseph Ratzinger durante casi veinte años (1984-2003), fue elevado al episcopado. Sin embargo, como reveló el arzobispo Carlo Maria Viganò, la investigación habitual del Vaticano antes de la consagración de un sacerdote sacó a la luz graves acusaciones de que era un homosexual activo.
Según ha podido saber LifeSite por el arzobispo Viganò, fue el nuncio de Alemania, el cardenal Giovanni Lajolo, quien le comunicó, a título oficial, que una investigación sobre la vida personal de Clemens había demostrado que existían fuertes sospechas de que era un homosexual practicante. Viganò también dijo a LifeSite que Ratzinger fue advertido en su momento de la homosexualidad de Clemens y que, sin embargo, lo consagró obispo.
En virtud de su trabajo en la curia, a Viganò se le encomendó la tarea de investigar a Clemens cuando se le consideró para el episcopado, como dijo Viganò a LifeSite.
"El nuncio en Alemania -continuó- era el cardenal Giovanni Lajolo. La información que envió desde Alemania era que había fuertes sospechas de que Clemens era un homosexual practicante. Por ello, su consejo fue negativo a la hora de nombrarlo obispo".
En ese momento, Viganò trabajaba como delegado de las Representaciones Pontificias. Él dijo: "Mi consejo, como responsable del personal en la curia, era también que Clemens no debía ser promovido (a obispo)". Sin embargo, continuó el arzobispo italiano, "más tarde se me informó de que Ratzinger quería que Clemens fuera promovido a pesar de la información que se me comunicó desde Alemania".
LifeSite supo por otra fuente fiable que el propio Ratzinger se había dirigido al cardenal Joachim Meisner, arzobispo de Colonia, para preguntarle si podía acoger a Clemens en su diócesis.
"Puedo confirmar", escribió la fuente de LifeSite que habló bajo condición de anonimato, "que el cardenal Meisner nos dijo que rechazó la petición de Ratzinger de acoger a Clemens en Colonia y que lo hizo con las palabras: 'no, a causa de la homo [sexualidad]'. Él [Meisner] también quiso ofrecer a Clemens una terapia que él rechazó".
Otra fuente en Roma dijo a LifeSite: "El hecho de que Josef Clemens era y es un homosexual activo es bien conocido entre nosotros aquí en Roma". Y otro contacto en Roma pudo confirmar con sus propias fuentes que Clemens es un homosexual activo.
Un experto del Vaticano que deseaba permanecer en el anonimato habló con LifeSite sobre el obispo Clemens y su misión de investigar los casos de abuso sexual en Klosterneuburg. Se preguntó espontáneamente si hacer a Clemens delegado papal de esta abadía no es similar "a pedirle al zorro que cuide el gallinero". Después de todo, añadió, "Clemens es bien conocido por sus tendencias entre los colegas de habla alemana en Roma, que a veces hacen bromas sobre su anterior profesión de peluquero".
El arzobispo Viganò dijo a LifeSite: "me informaron de que hubo una gran pelea entre Ganswein y Clemens", cuando Ratzinger eligió a Georg Gänswein como su nuevo secretario, en 2003.
LifeSite se puso en contacto con el obispo Clemens para pedirle que comentara los hechos expuestos en este informe, tanto los relacionados directamente con su vida personal como los relativos a la posición de los funcionarios de la Iglesia.
Clemens dijo que la afirmación de que es un homosexual practicante "es una falsedad" y después añadió, al ser preguntado sobre la inmoralidad de los actos homosexuales de un sacerdote, que "esto lo sabe un teólogo moral que escribió su tesis doctoral en teología moral".
Cuando se le preguntó sobre el cardenal Lajolo y el arzobispo Viganò y sus declaraciones, Clemens explicó que no tiene conocimiento de ello. Además, dijo a LifeSite que no respondería a más preguntas: "Al darle estas respuestas claras e inequívocas, considero que este asunto está cerrado".
Las peticiones sobre el obispo Clemens al papa emérito Benedicto XVI, a la Oficina de Prensa del Vaticano, así como al cardenal Lajolo han quedado sin respuesta. La arquidiócesis de Viena (Austria) tampoco respondió a nuestras solicitudes. El preboste Bernhard Backovsky tampoco ha respondido a la petición de LifeSite. Al parecer, la cultura del encubrimiento y del silencio sigue viva en la Iglesia.
¿Es esta la forma en que el Vaticano, después de las garantías del papa Francisco de que el abuso sexual y el encubrimiento de los abusos sexuales ahora se manejarán de manera diferente, está tratando con el sufrimiento de las víctimas de abuso sexual en Klosterneuburg?
Life Site News
Como dijo a LifeSite un testigo presencial (cuyo nombre es conocido por LifeSite pero no se publicará aquí), Veix dijo una vez que "tenía a Backovsky y a su hermano en el bolsillo", añadiendo que "Backovsky es mi seguro de vida".
Dr. Floridus Röhrig
El segundo informe sobre las acusaciones de abusos se refería al doctor Floridus Röhrig, un canónigo fallecido en 2014, pero que era uno de los miembros más destacados de la abadía. Era un erudito historiador de la Iglesia y profesor de la Universidad de Viena (Austria). Como tal, recibió numerosos honores.
Sin embargo, como hombre y sacerdote, parece haber vivido una vida muy diferente. LifeSite ha podido hablar con una de sus víctimas, Peter R. [seudónimo; la víctima desea permanecer en el anonimato], que afirma haber sufrido repetidos abusos sexuales por parte de este canónigo de la forma más grave cuando sólo tenía 13 años. Peter R. es una víctima reconocida, que ha recibido una pequeña indemnización económica. Tanto Peter R. como su hermano mayor declararon ya en público que fueron abusados sexualmente por el Dr. Floridus.
El padre alemán Michael Imlau, que fue miembro de la abadía de Klosterneuburg, dijo en 2019 que Röhrig tenía la reputación en la abadía de ser "el mayor pederasta de la baja Austria". Él mismo, según dijo a LifeSite, fue testigo de un Dr. Röhrig borracho -porque a menudo se emborrachaba por las noches- hablando de sus extrañas aventuras en los baños de Londres. Imlau también informó de que otro canónigo gritó una vez a Röhrig, delante de otros canónigos, diciéndole que se alejara de cierto joven canónigo al que Röhrig quería llevar de vacaciones a una playa nudista. Ese joven no sabía lo que iba a suponer esa visita.
Según Imlau, el canónigo mayor que deseaba proteger al canónigo joven le gritó a Röhrig delante de otros canónigos: "¡Cerdo asqueroso, aparta tus asquerosos dedos de él!" [del joven canónigo]. El padre Imlau añadió que ninguno de los canónigos que presenciaron este arrebato salió en defensa de Röhrig, sino que permanecieron en silencio, porque conocían su comportamiento inmoral.
Röhrig era el responsable de los boy scouts de la región, a los que llevaba regularmente de "viaje cultural". Tanto Peter R. como su hermano dijeron que Röhrig los llevaba durante esos viajes a playas nudistas, donde tomaba fotos de los chicos desnudos. Según el padre Imlau, en una ocasión, Röhrig, ebrio, mostró a dos de sus compañeros en su apartamento algunas de estas fotos que recogía en un álbum. Este incidente ha sido confirmado a LifeSite por otra fuente bien informada.
Clemens se ha puesto claramente del lado de los perpetradores
Dr. Floridus Röhrig
El padre alemán Michael Imlau, que fue miembro de la abadía de Klosterneuburg, dijo en 2019 que Röhrig tenía la reputación en la abadía de ser "el mayor pederasta de la baja Austria". Él mismo, según dijo a LifeSite, fue testigo de un Dr. Röhrig borracho -porque a menudo se emborrachaba por las noches- hablando de sus extrañas aventuras en los baños de Londres. Imlau también informó de que otro canónigo gritó una vez a Röhrig, delante de otros canónigos, diciéndole que se alejara de cierto joven canónigo al que Röhrig quería llevar de vacaciones a una playa nudista. Ese joven no sabía lo que iba a suponer esa visita.
Según Imlau, el canónigo mayor que deseaba proteger al canónigo joven le gritó a Röhrig delante de otros canónigos: "¡Cerdo asqueroso, aparta tus asquerosos dedos de él!" [del joven canónigo]. El padre Imlau añadió que ninguno de los canónigos que presenciaron este arrebato salió en defensa de Röhrig, sino que permanecieron en silencio, porque conocían su comportamiento inmoral.
Röhrig era el responsable de los boy scouts de la región, a los que llevaba regularmente de "viaje cultural". Tanto Peter R. como su hermano dijeron que Röhrig los llevaba durante esos viajes a playas nudistas, donde tomaba fotos de los chicos desnudos. Según el padre Imlau, en una ocasión, Röhrig, ebrio, mostró a dos de sus compañeros en su apartamento algunas de estas fotos que recogía en un álbum. Este incidente ha sido confirmado a LifeSite por otra fuente bien informada.
Clemens se ha puesto claramente del lado de los perpetradores
Como en el caso de Veix (el sacerdote ahora laicizado), también en este caso el preboste Backovsky está bajo sospecha de haber sabido y de no haber hecho nada para evitar más abusos o para hacer justicia. Pero desgraciadamente, después de la visita apostólica inicial, las propias investigaciones del obispo Clemens se limitaron a producir una declaración, en marzo de 2022, en la que declaraba que "la investigación recomendada por la Santa Sede ha concluido", y que ahora "es importante mirar al futuro y empezar de nuevo". El preboste Backovsky fue citado pidiendo disculpas por sus fallos. La declaración no ofrecía ninguna conclusión particular con respecto a los casos de abuso sexual que habían tenido lugar en la Abadía o lo que el preboste Backovsky hizo mal específicamente.
El comunicado explicaba que la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica del Vaticano había recomendado dicha investigación a la luz de la cuestión de cómo Backovsky había tratado los asuntos de abuso sexual. Por ello, Clemens había iniciado una investigación canónica por parte de un experto externo, que tuvo lugar en noviembre de 2021.
La declaración de marzo de 2022 continuaba así:
El informe final contiene la constatación de fallos en la prevención de la ocurrencia -o posterior tratamiento- de casos de abuso, así como de conductas sexuales indebidas por parte de miembros y ex miembros del monasterio por parte de la dirección del mismo en ese momento. Por ello, el preboste em. Bernhard Backovsky recibió una monitio (amonestación) canónica.Backovsky no experimentó ninguna consecuencia grave por su falta objetiva en el ámbito de los abusos sexuales; simplemente debía alejarse del monasterio "durante un periodo de tiempo adecuado", en aras de la curación. Sin embargo, ahora ya ha regresado a la abadía, según informó una fuente a LifeSite. (LifeSite recibió la confirmación de esto por parte del responsable de prensa de Klosterneuburg, quien explicó que el Vaticano permitió su regreso "por razones de salud"). Se rumorea que el propio asistente de Backovsky durante muchos años, Anton Hösling, podría ser elegido muy pronto como próximo preboste de la abadía.
El obispo Clemens, en esta declaración oficial de marzo de 2022, concluye que "la investigación canónica está ahora cerrada y el pasado ha sido tratado. Después de estos tiempos tumultuosos, ahora se puede mirar al futuro afrontando nuevos retos".
¿Está realmente cerrado el caso?
LifeSite ha sabido que el propio obispo Clemens provocó un gran escándalo el pasado mes de noviembre, al pronunciar una homilía en la abadía de Klosterneuburg con motivo de la fiesta de San Leopoldo, fundador de esta abadía. En varias ocasiones citó -entre otros- el trabajo académico del Dr. Röhrig, con lo que siguió dando protagonismo a este presunto sacerdote abusador.
No sólo tenía notas a pie de página con referencias al trabajo de Röhrig, sino que incluso citó algunas palabras de Röhrig sobre San Leopoldo en la segunda frase de su homilía.
LifeSite se puso en contacto con Peter R., una de las víctimas de Röhrig, para hablar de esto.
Él respondió: "Estoy conmocionado y me duele ver que el obispo Clemens, en su discurso en el monasterio, citó al Dr. Floridus, que nos hizo sufrir mucho a mí y a mi hermano".
Y añadió: “¡Paz a los perpetradores que causaron un gran sufrimiento a las víctimas! ¡La verdad es la redención de la propia alma para entrar en el Reino de Dios!”.
No sólo tenía notas a pie de página con referencias al trabajo de Röhrig, sino que incluso citó algunas palabras de Röhrig sobre San Leopoldo en la segunda frase de su homilía.
LifeSite se puso en contacto con Peter R., una de las víctimas de Röhrig, para hablar de esto.
Él respondió: "Estoy conmocionado y me duele ver que el obispo Clemens, en su discurso en el monasterio, citó al Dr. Floridus, que nos hizo sufrir mucho a mí y a mi hermano".
Y añadió: “¡Paz a los perpetradores que causaron un gran sufrimiento a las víctimas! ¡La verdad es la redención de la propia alma para entrar en el Reino de Dios!”.
Johannes Heibel, investigador de abusos sexuales en Alemania y en otros países, que ha desempeñado un papel importante en el descubrimiento del historial de abusos de Klosterneuburg, pide ahora incluso la dimisión de Clemens. Dijo a LifeSite:
Me parece vil y extraordinariamente hiriente, sobre todo hacia las víctimas de Röhrig, a las que he apoyado o en parte sigo apoyando, referirse al pederasta del monasterio nº 1 y citarlo en la ceremonia más importante del año para el monasterio [la fiesta de San Leopoldo, fundador de la abadía]. En mi opinión, Clemens se ha descalificado definitivamente y se ha puesto claramente del lado de los perpetradores. Tendría que dimitir de su cargo inmediatamente.
Obispo Clemens: Citar a Röhrig en la homilía no fue un respaldo
Según varias fuentes, todavía no se ha producido una verdadera curación.
LifeSiteNews ha podido saber más sobre la actitud del obispo Clemens y su forma de manejar las preguntas sobre su propia conducta.
En primer lugar, LifeSite se puso en contacto con él, pidiéndole que comentara su decisión de citar al Dr. Röhrig por su nombre.
En su respuesta, el obispo Clemens afirmó que "citar a Röhrig no era un respaldo a su persona. La cita del autor de una fuente cumple con las normas académicas aplicables y no dice nada sobre su persona". Luego Clemens continuó señalando que es incorrecto afirmar que "citó positivamente" a Röhrig: "No se corresponde con la verdad que en el sermón del Delegado [Papal] el autor fue citado positivamente varias veces. Las citas o referencias no son valoraciones personales, sino referencias académicamente útiles o pruebas necesarias de las fuentes utilizadas".
Sin embargo, la mención de Röhrig por parte de Clemens en la segunda frase de su homilía sólo sirvió para presentar una traducción de Röhrig de una frase en latín, y por lo tanto seguramente se podría haber evitado, si se tuviera sensibilidad hacia las víctimas de Röhrig.
LifeSite también preguntó al obispo Clemens si su investigación canónica examinó el caso de este canónigo y si encontró que Röhrig era inocente (una posible explicación para que mencionara su nombre en su homilía).
Pero esta pregunta quedó esencialmente sin respuesta, ya que Clemens se limitó a informar sobre las normas que seguía la investigación y que él, como delegado papal, está "siguiendo, en su evaluación de los casos individuales, las percepciones y evaluaciones de los órganos responsables de la arqyidiócesis de Viena".
Es decir, no respondió a nuestra pregunta. No se pretendía la transparencia, como parece.
Esta impresión se vio reforzada cuando el 15 de mayo, LifeSite habló con el padre Michael Imlau, testigo presencial de las múltiples corrupciones que rodean a la Abadía. Él y otro sacerdote se habían reunido este mes con Clemens. Una de sus objeciones fue que Clemens ni siquiera los había entrevistado -dos testigos importantes- antes de declarar cerrada la investigación canónica (en marzo de este año).
Cuando el padre Imlau sacó a relucir el caso Röhrig y su mala conducta sexual, el obispo Clemens le dijo a Imlau que, si se había guardado silencio sobre el caso en su momento, se había hecho "para evitar daños a la Iglesia". Imlau dijo a LifeSite que el obispo Clemens también dijo que el contenido de su conversación "no debería ser compartido con la prensa".
Por lo tanto, tanto el padre Imlau como su colega sacerdote tuvieron la impresión de que todavía existe el espíritu de encubrimiento. Tanto él como otros observadores del caso Klosterneuburg son de la opinión de que el caso no debe cerrarse todavía.
Mons. Viganò: 'Hay fuertes sospechas de que Clemens es un homosexual activo'
Johannes Heibel comentó las respuestas del obispo Clemens a LifeSite de la siguiente manera: "Bueno, básicamente, no son respuestas a sus preguntas en absoluto. De forma arrogante, extremadamente arrogante, sermoneadora, típica del clero, se limita a remitirse a las normas y reglamentos y demuestra así que no ha aprendido nada".
"Al ignorar lo que los perpetradores y sus cómplices han hecho a las víctimas", continuó, "el obispo Clemens se muestra como un hombre implicado en el encubrimiento". Para Heibel, está claro que Clemens "no está interesado en ninguna investigación real ni en el esclarecimiento de los hechos ocurridos en el monasterio", tratando de evitar un mayor daño a la "ya maltrecha reputación del monasterio".
"Al no informar al público de forma exhaustiva, se une sin problemas a las filas de los encubridores", concluyó Heibel.
LifeSite también se puso en contacto con un experto en protección de menores y le presentó nuestras conclusiones. Comentó: "Toda medida sincera y todo esfuerzo honesto para investigar, abordar y prevenir los abusos debe guiarse por el principio de que la preocupación por los afectados por los abusos es la prioridad".
A la luz del daño que el obispo Clemens está añadiendo a la situación en Klosterneuburg, podría valer la pena cuestionar la decisión del Vaticano de nombrarlo delegado papal en Klosterneuburg.
Josef Clemens
El propio Clemens tiene una historia personal controvertida. Tras haber sido secretario personal del entonces cardenal Joseph Ratzinger durante casi veinte años (1984-2003), fue elevado al episcopado. Sin embargo, como reveló el arzobispo Carlo Maria Viganò, la investigación habitual del Vaticano antes de la consagración de un sacerdote sacó a la luz graves acusaciones de que era un homosexual activo.
Según ha podido saber LifeSite por el arzobispo Viganò, fue el nuncio de Alemania, el cardenal Giovanni Lajolo, quien le comunicó, a título oficial, que una investigación sobre la vida personal de Clemens había demostrado que existían fuertes sospechas de que era un homosexual practicante. Viganò también dijo a LifeSite que Ratzinger fue advertido en su momento de la homosexualidad de Clemens y que, sin embargo, lo consagró obispo.
En virtud de su trabajo en la curia, a Viganò se le encomendó la tarea de investigar a Clemens cuando se le consideró para el episcopado, como dijo Viganò a LifeSite.
"El nuncio en Alemania -continuó- era el cardenal Giovanni Lajolo. La información que envió desde Alemania era que había fuertes sospechas de que Clemens era un homosexual practicante. Por ello, su consejo fue negativo a la hora de nombrarlo obispo".
En ese momento, Viganò trabajaba como delegado de las Representaciones Pontificias. Él dijo: "Mi consejo, como responsable del personal en la curia, era también que Clemens no debía ser promovido (a obispo)". Sin embargo, continuó el arzobispo italiano, "más tarde se me informó de que Ratzinger quería que Clemens fuera promovido a pesar de la información que se me comunicó desde Alemania".
LifeSite supo por otra fuente fiable que el propio Ratzinger se había dirigido al cardenal Joachim Meisner, arzobispo de Colonia, para preguntarle si podía acoger a Clemens en su diócesis.
"Puedo confirmar", escribió la fuente de LifeSite que habló bajo condición de anonimato, "que el cardenal Meisner nos dijo que rechazó la petición de Ratzinger de acoger a Clemens en Colonia y que lo hizo con las palabras: 'no, a causa de la homo [sexualidad]'. Él [Meisner] también quiso ofrecer a Clemens una terapia que él rechazó".
Otra fuente en Roma dijo a LifeSite: "El hecho de que Josef Clemens era y es un homosexual activo es bien conocido entre nosotros aquí en Roma". Y otro contacto en Roma pudo confirmar con sus propias fuentes que Clemens es un homosexual activo.
Un experto del Vaticano que deseaba permanecer en el anonimato habló con LifeSite sobre el obispo Clemens y su misión de investigar los casos de abuso sexual en Klosterneuburg. Se preguntó espontáneamente si hacer a Clemens delegado papal de esta abadía no es similar "a pedirle al zorro que cuide el gallinero". Después de todo, añadió, "Clemens es bien conocido por sus tendencias entre los colegas de habla alemana en Roma, que a veces hacen bromas sobre su anterior profesión de peluquero".
El arzobispo Viganò dijo a LifeSite: "me informaron de que hubo una gran pelea entre Ganswein y Clemens", cuando Ratzinger eligió a Georg Gänswein como su nuevo secretario, en 2003.
LifeSite se puso en contacto con el obispo Clemens para pedirle que comentara los hechos expuestos en este informe, tanto los relacionados directamente con su vida personal como los relativos a la posición de los funcionarios de la Iglesia.
Clemens dijo que la afirmación de que es un homosexual practicante "es una falsedad" y después añadió, al ser preguntado sobre la inmoralidad de los actos homosexuales de un sacerdote, que "esto lo sabe un teólogo moral que escribió su tesis doctoral en teología moral".
Cuando se le preguntó sobre el cardenal Lajolo y el arzobispo Viganò y sus declaraciones, Clemens explicó que no tiene conocimiento de ello. Además, dijo a LifeSite que no respondería a más preguntas: "Al darle estas respuestas claras e inequívocas, considero que este asunto está cerrado".
Las peticiones sobre el obispo Clemens al papa emérito Benedicto XVI, a la Oficina de Prensa del Vaticano, así como al cardenal Lajolo han quedado sin respuesta. La arquidiócesis de Viena (Austria) tampoco respondió a nuestras solicitudes. El preboste Bernhard Backovsky tampoco ha respondido a la petición de LifeSite. Al parecer, la cultura del encubrimiento y del silencio sigue viva en la Iglesia.
¿Es esta la forma en que el Vaticano, después de las garantías del papa Francisco de que el abuso sexual y el encubrimiento de los abusos sexuales ahora se manejarán de manera diferente, está tratando con el sufrimiento de las víctimas de abuso sexual en Klosterneuburg?
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