Por Jeanne Smits
La “Guía para docentes sobre educación sexual integral - Educación para toda la vida” tiene como objetivo ayudar a los docentes a informar a los niños y jóvenes desde el nivel elemental hasta la edad adulta sobre todos los asuntos relacionados con la sexualidad, la procreación, los anticonceptivos, cómo usar un condón, aborto, “identidad de género”, etc. desde una perspectiva de salud sexual y reproductiva.
El curso fue desarrollado por una ONG latinoamericana de “derechos humanos”, Servicio Paz y Justicia (SERPAJ), su coordinador general fue durante un tiempo el Premio Nobel de la Paz, ganador Adolfo Pérez Esquivel, y por la ONG protestante sueca Diakonia. El objetivo de Diakonia es “cambiar las estructuras políticas, económicas, sociales y culturales injustas que generan pobreza, opresión y violencia” y afirma que “el punto de partida de estos esfuerzos es el Evangelio, en el que se basa su política con Jesús como modelo a seguir”.
“La visión de Diakonia incluye a todas las personas independientemente de su religión, género, etnia, color, orientación sexual, idioma, creencias ideológicas o políticas, origen nacional o social, propiedad, edad, nacimiento o cualquier otro estado”, según su sitio web.
La Guía es una presentación de 208 páginas de la sexualidad como un “constructo social” y presenta las relaciones sexuales como cualquier contacto sexual entre “dos o más personas, independientemente de su sexo biológico”. Presenta el vínculo entre la actividad sexual y la procreación como “una característica anticuada”, lamenta los abortos “inseguros” y promueve la ideología de género. Muchas de las actividades sugeridas por la Guía se basan en dinámicas de grupo.
En julio del año pasado, representantes del movimiento juvenil “Somos muchos más” solicitaron al ministro de educación paraguayo que prohibiera la instrucción de los maestros en educación sexual debido a su apoyo al aborto y la “perspectiva de género”, “ninguno de los cuales ha sido aprobado por los jefes de familia”. Raúl Aguilera, quien era ministro en ese momento, entregó la solicitud a su viceministro de educación primaria, y allí el asunto pareció terminar.
Desde entonces, Aguilera ha sido reemplazada por Eduardo Petta, uno de los dos ministros evangélicos en el actual gobierno paraguayo. Petta emitió una resolución a principios de este mes en base a los hallazgos del gabinete del viceministro sobre la Guía y varias consultas públicas. Los hallazgos fueron publicados a finales de enero. Eduardo Petta describió claramente los puntos en cuestión, incluida la “devaluación de los conceptos de feminidad y masculinidad” y el enfoque en la autonomía sexual de los jóvenes menores de edad, “incluidos los niños, que están bajo la autoridad de sus padres”.
El texto del ministro recuerda que “el respeto a la familia y su participación en la educación de sus hijos es un principio constitucional” que como tal crea derechos para todas las familias con respecto a las ofertas educativas.
La resolución establece claramente que entre los “conceptos” utilizados en la Guía, prevalecen aquellos relacionados con “la construcción de la identificación sexual en forma libertina”.
La resolución del gobierno incluye controles en las escuelas para asegurarse de que la Guía no se esté utilizando.
SERPAJ emitió un comunicado diciendo que el Ministerio de Educación no tiene la capacidad de impedir que los maestros lean la Guía debido a su “autonomía intelectual personal”, un “principio básico de la educación”. El material está dirigido a estudiantes mayores de 15 años, agregó la ONG y sus intereses y prioridades pueden ser implementados en las escuelas por maestros de acuerdo con las características propias de sus estudiantes. Los maestros “son capaces de leer y entender lo que consideran apropiado o no para el desarrollo de sus clases”.
Los autores de la Guía agregan que “la lucha contra los estereotipos de género es un requisito previo para evitar el abuso sexual infantil”.
Eduardo Petta no mostró signos de debilidad. En noviembre pasado, el ministro se reunió personalmente con los portavoces de una manifestación pro vida frente a su ministerio para exigir el fin de la “ideología de género” en las escuelas y colegios, así como la protección de la familia tradicional.
Al afirmar que “ningún tipo de ideología extraña a sus preceptos constitucionales puede violar la soberanía de Paraguay”, Petta prometió que la familia tradicional desempeñaría su papel en la próxima reforma de la educación. “La familia, compuesta por un hombre y una mujer, participará en las decisiones del Ministerio de Educación durante el proceso de transformación”, dijo.
LifeSiteNews
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