Por Christopher R. Altieri
El obispo Gustavo Zanchetta, emérito de Orán, Argentina, es actualmente Asesor de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA). El obispo confirmó por teléfono a este medio que estaba de retiro.
El retiro de Cuaresma de una semana en la Casa del Divino Maestro comenzó el domingo por la tarde.
Una declaración del 4 de enero de la Oficina de Prensa de la Santa Sede dijo que el obispo Zanchetta “se abstendría de trabajar” durante la investigación. “Si se confirman los elementos para proceder”, decía el comunicado del 4 de enero, “el caso será remitido a la comisión especial para los obispos”.
La Oficina de Prensa de la Santa Sede no había respondido al cierre de esta edición a las solicitudes de información sobre el estado actual del obispo Zanchetta.
El papa Francisco permitió que Zanchetta renunciara a Oran en agosto de 2017. La Oficina de Prensa de la Santa Sede no dio ninguna razón para la renuncia de Zanchetta, pero el obispo citó "problemas de salud". En diciembre de 2017, Bergoglio nombró a Zanchetta para un puesto en la APSA especialmente creado para él.
Los informes basados en entrevistas y documentación muestran que el Bergoglio había visto evidencia del comportamiento inmoral del obispo Zanchetta, incluidas pruebas fotográficas y denuncias de que acosaba sexualmente a los seminaristas, ya en 2015.
Cuando surgieron noticias sobre la investigación de la conducta del obispo Zanchetta a principios de enero, la Oficina de Prensa de la Santa Sede emitió un comunicado diciendo que Zanchetta había renunciado a su sede porque no podía gobernar el clero y que las acusaciones de conducta sexual inapropiada no se presentaron hasta el otoño de 2018. “En el momento de su renuncia [en 2017]”, dijo el director de la oficina de prensa, Alessandro Gisotti, en el comunicado, “hubo acusaciones de autoritarismo contra Zanchetta, pero no hubo ninguna acusación de abuso sexual contra él”.
Más tarde, se supo que el exvicario general de Orán, el padre Juan José Manzano, envió pruebas del comportamiento del obispo Zanchetta al Vaticano en 2015 y 2017.
El padre Manzano le dijo a Associated Press: “En 2015, acabamos de enviar un 'apoyo digital' con selfies del obispo anterior [Zanchetta] con un comportamiento obsceno o fuera de lugar 'que parecía' inapropiado y peligroso”. El padre Manzano explicó: “Fue una alarma que hicimos llegar a la Santa Sede a través de algunos obispos amigos”.
“La nunciatura no intervino directamente”, dijo el padre Manzano, pero el "santo padre" convocó a Zanchetta y lo justificó diciendo que le habían hackeado el celular.
El periódico El Tribuno de Salta de Argentina publicó más tarde documentos que muestran la primera denuncia, en 2015, informó que Zanchetta tenía en su teléfono celular imágenes de él mismo masturbándose desnudo y pornografía homosexual que involucraba a jóvenes en actividades sexuales homosexuales.
Los documentos publicados por El Tribuno también contienen declaraciones del rector del seminario de Orán, en el sentido de que estaba tan preocupado por el comportamiento de monseñor Zanchetta que informó a la nunciatura en 2016 que sus alumnos de primer año —que tenían clases en la residencia del obispo— exigían “medidas urgentes” para su protección.
Esa queja de 2016 enumera "comportamientos extraños" que incluyen "observar [a los seminaristas] por la noche, caminar por sus habitaciones a altas horas de la noche con una linterna, pedir masajes, entrar en sus habitaciones y sentarse en sus camas o alentarlos a beber bebidas alcohólicas, o [mostrar] ciertas preferencias por algunos [seminaristas] más “agraciados”.
Catholic Herald
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