Este trabajo no está dirigido en manera alguna contra el Partido Justicialista sino contra aquellos que usan ese escudo, sin sentirlo ni conocer su doctrina, para beneficiarse de una actividad tan lucrativa como la política.
Por Hugo Cesar Renés
¡Descúbralos y desenmascárelos ahora!, (antes de que seamos nuevamente estafados).
...Del libro Manual de Doctrina y Organización Nacional, impreso en la Dirección General de Difusión del Ministerio de Ejército el día 31 de marzo de 1953, el mismo que fuera posteriormente remozado y titulado “Conducción Política”, he extraído algunos párrafos que son verdaderas ideas fuerza sobre lo que realmente debe pensar, sentir y practicar quien sea y se sienta UN AUTENTICO PERONISTA:
“La libertad hay que asegurarla dando primero al hombre la libertad económica, que es fundamental, no la libertad de unos pocos para hacer lo que quieran y la libertad de los más para morirse de hambre”.
Consigna también en la pág. 35 del citado manual: “La finalidad del Justicialismo no es el Estado ni es el capital, ni siquiera es la comunidad considerada como una unidad indivisible. La finalidad es el hombre, pero tampoco el hombre aislado puesto al término de los afanes de la obra de gobierno, sino el hombre que vive plenamente en la comunidad”.
Temas polémicos estos que viven en el partido justicialista (y lo sufrimos todos), porque sus dirigentes no cumplen con los principios partidarios rectores (y muchos ni los conocen) y, si no cumplen con esos principios, es porque obviamente NO SON PERONISTAS. Veamos si no:
Ayer fueron 20 verdades fundamentales del justicialismo (hoy, salvo algunos muy antiguos dirigentes que podría contarlos con los dedos de una mano, el resto no sabe enunciar 10 de ellas; si le cabe alguna duda, compruébelo usted mismo, yo se las reproduzco y si conoce a algún peronista del sector que sea, pregúntele. Para un verdadero peronista las 20 verdades son como los 10 mandamientos para un cristiano).
“...He querido reunirlas así para que cada peronista las grabe en su mente y en su corazón para que las propale como un mensaje de amor y de justicia por todas partes; para que honrada y lealmente las practique; para que viva feliz según ellas, y también para que muera feliz en su defensa, si fuera necesario”. (Perón)
1. La verdadera democracia es aquella donde el gobierno hace lo que el pueblo quiere y define un solo interés: el del pueblo.
2. El peronismo es esencialmente popular. Todo círculo político es antipopular y por lo tanto no es peronista.
3. El peronista trabaja para el movimiento. El que en su nombre sirve a un círculo, o a un caudillo, lo es sólo de nombre.
4. No existe para el peronismo, más que una sola clase de hombres: los que trabajan.
5. En la Nueva Argentina, el trabajo es un derecho, que crea la dignidad del hombre, y es un deber, porque es justo que cada uno produzca por lo menos lo que consume.
6. Para un peronista no puede haber nada mejor que otro peronista, y para un argentino nada mejor que otro argentino.
(El peronismo vive sumergido en una polémica interna antropófaga, en la que no esta ausente la violencia verbal y/o hasta física, porque los “candidatos” solo buscan satisfacer ambiciones personales, venganzas y traiciones, carpeteándose asquerosamente los unos a los otros).
7. Ningún peronista debe sentirse más de lo que es, ni menos de lo que debe ser. Cuando un peronista comienza a sentirse más de lo que es, empieza a convertirse en oligarca.
8. En la acción política, la escala de valores de todo peronista es la siguiente: primero, la Patria; después el movimiento y luego los hombres.
9. La política no es para nosotros un fin, sino sólo el medio para el bien de la Patria, que es la felicidad de sus hijos y la grandeza nacional.
10. Los dos brazos del peronismo son la justicia social y la ayuda social. con ellos damos al pueblo un abrazo de justicia y amor.
11. El peronismo anhela la unidad nacional y no la lucha. Desea héroes, pero no mártires.
12. En la Nueva Argentina los únicos privilegiados son los niños.
13. Un gobierno sin doctrina es un cuerpo sin alma. Por eso el peronismo tiene su propia doctrina política, económica y social: el justicialismo.
14. El justicialismo es una nueva filosofía de vida, simple, práctica, popular, profundamente cristiana y profundamente humanista.
15. Como doctrina política, el justicialismo realiza el equilibrio del derecho del individuo con el de la comunidad.
16. Como doctrina económica, el justicialismo realiza la economía social, poniendo el capital al servicio de la economía y ésta al servicio del bienestar social.
17. Como doctrina social, el justicialismo realiza la justicia social, que da a cada persona su derecho en función social.
18. Queremos una Argentina socialmente justa, económicamente libre y políticamente soberana.
19. Constituimos un gobierno centralizado, un Estado organizado y un pueblo libre.
20. En esta tierra lo mejor que tenemos es el pueblo.
Derechos de la ancianidad (léase ¿jubilados?)
Artículo 37 de la Carta Magna Justicialista. DERECHOS DE LA ANCIANIDAD:
El punto 6., expresa que deberá asegurarse el libre ejercicio de las expansiones espirituales, concordes con la moral y el culto.
El punto 9., afirma que debe el anciano gozar de tranquilidad, libre de angustias y preocupaciones.
El problema de las jubilaciones y pensiones de nuestros abuelos se soluciona cumpliendo, como peronistas, si es que en verdad lo fueran, los puntos 6 y 9 de los derechos para la ancianidad, con buena voluntad y predisposición, que permanentemente demuestran no tener, por lo menos para con un sector muy importante de nuestros ancianos).
El sindicalismo
(El que según los líderes cegetistas, está siendo afectado por una campaña de desprestigio, involucrándolos en polémicas operaciones inmobiliarias y de corrupción administrativa, con la intención de limitar su poder).
El fundador de la doctrina justicialista estableció un aspecto fundamental y genuino al respecto: “muchas personas piensan que la agremiación es una disciplina privativa de los obreros. Gravísimo error. En las agrupaciones humanas la unión de las personas que desarrollan una misma actividad, es de importancia capital para la unidad del Estado”. Surge de esta afirmación que los sindicatos no son organizaciones para los obreros solamente, sino que deben agrupar orgánicamente a todas las personas que desarrollan una misma actividad, de cualquier tipo que esta sea (¿dónde podrían agruparse los militares, las fuerzas de seguridad y policiales para poder defender sus derechos económicos, sociales, culturales y los de sus familias?. ¿Y los jubilados y retirados?).
“...Nosotros no queremos ni gremios socialistas, ni radicales, ni conservadores, ni comunistas. Queremos gremios dentro de los cuales se agrupen naturalmente por profesión; que se aúnen los zapateros, los carniceros, los agrarios, porque nadie va a representar a ellos en forma que tengan algo que agradecerle, si los hombres de ese gremio no van tras la necesidad y las aspiraciones de sus compañeros de lucha”.
Dijo el Papa Pío XII: “Cuidad de que el sindicato no se desvíe de su propio campo transformándose en un instrumento de lucha de clases o de intereses de partido”.
Supo escribir el general Perón: “Desgraciadamente, hemos visto en estos últimos tiempos, dirigentes sindicales que han delinquido en los aspectos más sagrados de la misión que sus compañeros le asignaran, lo que quiere decir que así como se está pudriendo todo en el país como consecuencia de los gobiernos y dictaduras que sufre, la descomposición comienza también a llegar hasta nuestras propias formaciones. El peligro puede ser aún mayor si no se toman medidas enérgicas y drásticas con los que se animan a traicionar desaprensivamente la fe que los trabajadores han puesto en ellos”. “...No podemos dejar de reconocer, queridos compañeros, que si el mal ejemplo cunde, no pasará mucho tiempo sin que la escuela de los traidores sea la regla de los que anhelan enriquecerse aunque sea a costa de la desgracia de todos los compañeros”. (párrafos de una carta fechada en Madrid el 25 de junio de 1967 escrita por el Gral. Perón a Carlos Pereyra, entonces secretario general de la lista marrón del gremio de la construcción).
La realidad hoy, aquí y ahora: Hay serias sospechas sobre la situación patrimonial de muchos sindicalistas. En relación a que puedan ser instrumentos de los intereses de algún partido político no hay mucho que discutir: “El justicialismo, comprendiendo hasta que punto el sentido sindical domina en el mundo al sentido político, ha dado a los sindicatos gremiales el carácter de asociaciones naturales para los trabajadores, así como las familias son asociaciones naturales por excelencia para los hombres”. “...El justicialismo está sostenido por el sindicalismo...” (Del Manual de Doctrina y Organización Nacional, pág. 159 /166).
Para seguir descubriendo a los simuladores de una virtud que luego no practican, y para entender el pensamiento de Perón en las distintas áreas que configuran la realidad total del hombre, les propongo que lean, además del mencionado Manual de Doctrina, el libro Perón en la doctrina, presentado por Juan Carlos Rousselot y por último, el libro La Idea Peronista de Carlos J. Rodríguez. Si insiste luego votando a un camaleón, el problema ya es suyo (el drama será nuestro).
Supo decir el general Perón (en relación al transfuguismo político):
“El falso político se sirve de todo, porque se beneficia con los cargos públicos. El político autentico es el estadista que sólo se preocupa por los fines objetivos perseguidos por el Estado y toma la función de gobernar como una carga pública”.
“...No hay buenas instituciones con malos hombres. Nuestro problema es de regeneración”.
“...Las instituciones humanas no se fundamentan con separaciones y odios, sino con colaboración y amor”.
“...Si la economía no sirve para llevar el bienestar a toda la población, y solo a una parte de ella, resulta cosa bien despreciable. Siendo así, se hace necesario iniciar una reforma integral para corregir los desaciertos y encaminar la acción del Estado hacia una distribución efectivamente nacional y justa”.
¿QUÉ DEBERÍAMOS TENER EN CUENTA PARA ELEGIR A UN CANDIDATO?:
¿LO QUE APARENTA?
(TRATA A SUS PARES DE COMPAÑEROS) AUNQUE NO CUMPLA NI LE INTERESEN LOS PRINCIPIOS FUNDACIONALES DEL PARTIDO QUE REPRESENTA,
¿O LO QUE DICE QUE VA A HACER?
AUNQUE SEPAMOS DE ANTEMANO QUE NO LO HARÁ.
¡¡Qué dilema!! ¿no?
“...¡Nada ni nadie por encima de la Patria. Sólo la Providencia de Dios prodigando sus bendiciones. Nosotros, todos unidos para amarla, para idolatrarla y para defenderla!”. (Perón)
¿Perseguía el general Perón un esquema de Estado Marxista-colectivista?
Los actuales conductores del justicialismo y su entorno, ¿qué persiguen?
¡ NO SE DISTRAIGA NI DEJEN QUE LO DISTRAIGAN POR FAVOR...!!!!
En azul y blanco.
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Por Hugo Cesar Renés
¡Descúbralos y desenmascárelos ahora!, (antes de que seamos nuevamente estafados).
...Del libro Manual de Doctrina y Organización Nacional, impreso en la Dirección General de Difusión del Ministerio de Ejército el día 31 de marzo de 1953, el mismo que fuera posteriormente remozado y titulado “Conducción Política”, he extraído algunos párrafos que son verdaderas ideas fuerza sobre lo que realmente debe pensar, sentir y practicar quien sea y se sienta UN AUTENTICO PERONISTA:
“La libertad hay que asegurarla dando primero al hombre la libertad económica, que es fundamental, no la libertad de unos pocos para hacer lo que quieran y la libertad de los más para morirse de hambre”.
Consigna también en la pág. 35 del citado manual: “La finalidad del Justicialismo no es el Estado ni es el capital, ni siquiera es la comunidad considerada como una unidad indivisible. La finalidad es el hombre, pero tampoco el hombre aislado puesto al término de los afanes de la obra de gobierno, sino el hombre que vive plenamente en la comunidad”.
Temas polémicos estos que viven en el partido justicialista (y lo sufrimos todos), porque sus dirigentes no cumplen con los principios partidarios rectores (y muchos ni los conocen) y, si no cumplen con esos principios, es porque obviamente NO SON PERONISTAS. Veamos si no:
Ayer fueron 20 verdades fundamentales del justicialismo (hoy, salvo algunos muy antiguos dirigentes que podría contarlos con los dedos de una mano, el resto no sabe enunciar 10 de ellas; si le cabe alguna duda, compruébelo usted mismo, yo se las reproduzco y si conoce a algún peronista del sector que sea, pregúntele. Para un verdadero peronista las 20 verdades son como los 10 mandamientos para un cristiano).
“...He querido reunirlas así para que cada peronista las grabe en su mente y en su corazón para que las propale como un mensaje de amor y de justicia por todas partes; para que honrada y lealmente las practique; para que viva feliz según ellas, y también para que muera feliz en su defensa, si fuera necesario”. (Perón)
1. La verdadera democracia es aquella donde el gobierno hace lo que el pueblo quiere y define un solo interés: el del pueblo.
2. El peronismo es esencialmente popular. Todo círculo político es antipopular y por lo tanto no es peronista.
3. El peronista trabaja para el movimiento. El que en su nombre sirve a un círculo, o a un caudillo, lo es sólo de nombre.
4. No existe para el peronismo, más que una sola clase de hombres: los que trabajan.
5. En la Nueva Argentina, el trabajo es un derecho, que crea la dignidad del hombre, y es un deber, porque es justo que cada uno produzca por lo menos lo que consume.
6. Para un peronista no puede haber nada mejor que otro peronista, y para un argentino nada mejor que otro argentino.
(El peronismo vive sumergido en una polémica interna antropófaga, en la que no esta ausente la violencia verbal y/o hasta física, porque los “candidatos” solo buscan satisfacer ambiciones personales, venganzas y traiciones, carpeteándose asquerosamente los unos a los otros).
7. Ningún peronista debe sentirse más de lo que es, ni menos de lo que debe ser. Cuando un peronista comienza a sentirse más de lo que es, empieza a convertirse en oligarca.
8. En la acción política, la escala de valores de todo peronista es la siguiente: primero, la Patria; después el movimiento y luego los hombres.
9. La política no es para nosotros un fin, sino sólo el medio para el bien de la Patria, que es la felicidad de sus hijos y la grandeza nacional.
10. Los dos brazos del peronismo son la justicia social y la ayuda social. con ellos damos al pueblo un abrazo de justicia y amor.
11. El peronismo anhela la unidad nacional y no la lucha. Desea héroes, pero no mártires.
12. En la Nueva Argentina los únicos privilegiados son los niños.
13. Un gobierno sin doctrina es un cuerpo sin alma. Por eso el peronismo tiene su propia doctrina política, económica y social: el justicialismo.
14. El justicialismo es una nueva filosofía de vida, simple, práctica, popular, profundamente cristiana y profundamente humanista.
15. Como doctrina política, el justicialismo realiza el equilibrio del derecho del individuo con el de la comunidad.
16. Como doctrina económica, el justicialismo realiza la economía social, poniendo el capital al servicio de la economía y ésta al servicio del bienestar social.
17. Como doctrina social, el justicialismo realiza la justicia social, que da a cada persona su derecho en función social.
18. Queremos una Argentina socialmente justa, económicamente libre y políticamente soberana.
19. Constituimos un gobierno centralizado, un Estado organizado y un pueblo libre.
20. En esta tierra lo mejor que tenemos es el pueblo.
Derechos de la ancianidad (léase ¿jubilados?)
Artículo 37 de la Carta Magna Justicialista. DERECHOS DE LA ANCIANIDAD:
El punto 6., expresa que deberá asegurarse el libre ejercicio de las expansiones espirituales, concordes con la moral y el culto.
El punto 9., afirma que debe el anciano gozar de tranquilidad, libre de angustias y preocupaciones.
El problema de las jubilaciones y pensiones de nuestros abuelos se soluciona cumpliendo, como peronistas, si es que en verdad lo fueran, los puntos 6 y 9 de los derechos para la ancianidad, con buena voluntad y predisposición, que permanentemente demuestran no tener, por lo menos para con un sector muy importante de nuestros ancianos).
El sindicalismo
(El que según los líderes cegetistas, está siendo afectado por una campaña de desprestigio, involucrándolos en polémicas operaciones inmobiliarias y de corrupción administrativa, con la intención de limitar su poder).
El fundador de la doctrina justicialista estableció un aspecto fundamental y genuino al respecto: “muchas personas piensan que la agremiación es una disciplina privativa de los obreros. Gravísimo error. En las agrupaciones humanas la unión de las personas que desarrollan una misma actividad, es de importancia capital para la unidad del Estado”. Surge de esta afirmación que los sindicatos no son organizaciones para los obreros solamente, sino que deben agrupar orgánicamente a todas las personas que desarrollan una misma actividad, de cualquier tipo que esta sea (¿dónde podrían agruparse los militares, las fuerzas de seguridad y policiales para poder defender sus derechos económicos, sociales, culturales y los de sus familias?. ¿Y los jubilados y retirados?).
“...Nosotros no queremos ni gremios socialistas, ni radicales, ni conservadores, ni comunistas. Queremos gremios dentro de los cuales se agrupen naturalmente por profesión; que se aúnen los zapateros, los carniceros, los agrarios, porque nadie va a representar a ellos en forma que tengan algo que agradecerle, si los hombres de ese gremio no van tras la necesidad y las aspiraciones de sus compañeros de lucha”.
Dijo el Papa Pío XII: “Cuidad de que el sindicato no se desvíe de su propio campo transformándose en un instrumento de lucha de clases o de intereses de partido”.
Supo escribir el general Perón: “Desgraciadamente, hemos visto en estos últimos tiempos, dirigentes sindicales que han delinquido en los aspectos más sagrados de la misión que sus compañeros le asignaran, lo que quiere decir que así como se está pudriendo todo en el país como consecuencia de los gobiernos y dictaduras que sufre, la descomposición comienza también a llegar hasta nuestras propias formaciones. El peligro puede ser aún mayor si no se toman medidas enérgicas y drásticas con los que se animan a traicionar desaprensivamente la fe que los trabajadores han puesto en ellos”. “...No podemos dejar de reconocer, queridos compañeros, que si el mal ejemplo cunde, no pasará mucho tiempo sin que la escuela de los traidores sea la regla de los que anhelan enriquecerse aunque sea a costa de la desgracia de todos los compañeros”. (párrafos de una carta fechada en Madrid el 25 de junio de 1967 escrita por el Gral. Perón a Carlos Pereyra, entonces secretario general de la lista marrón del gremio de la construcción).
La realidad hoy, aquí y ahora: Hay serias sospechas sobre la situación patrimonial de muchos sindicalistas. En relación a que puedan ser instrumentos de los intereses de algún partido político no hay mucho que discutir: “El justicialismo, comprendiendo hasta que punto el sentido sindical domina en el mundo al sentido político, ha dado a los sindicatos gremiales el carácter de asociaciones naturales para los trabajadores, así como las familias son asociaciones naturales por excelencia para los hombres”. “...El justicialismo está sostenido por el sindicalismo...” (Del Manual de Doctrina y Organización Nacional, pág. 159 /166).
Para seguir descubriendo a los simuladores de una virtud que luego no practican, y para entender el pensamiento de Perón en las distintas áreas que configuran la realidad total del hombre, les propongo que lean, además del mencionado Manual de Doctrina, el libro Perón en la doctrina, presentado por Juan Carlos Rousselot y por último, el libro La Idea Peronista de Carlos J. Rodríguez. Si insiste luego votando a un camaleón, el problema ya es suyo (el drama será nuestro).
Supo decir el general Perón (en relación al transfuguismo político):
“El falso político se sirve de todo, porque se beneficia con los cargos públicos. El político autentico es el estadista que sólo se preocupa por los fines objetivos perseguidos por el Estado y toma la función de gobernar como una carga pública”.
“...No hay buenas instituciones con malos hombres. Nuestro problema es de regeneración”.
“...Las instituciones humanas no se fundamentan con separaciones y odios, sino con colaboración y amor”.
“...Si la economía no sirve para llevar el bienestar a toda la población, y solo a una parte de ella, resulta cosa bien despreciable. Siendo así, se hace necesario iniciar una reforma integral para corregir los desaciertos y encaminar la acción del Estado hacia una distribución efectivamente nacional y justa”.
¿QUÉ DEBERÍAMOS TENER EN CUENTA PARA ELEGIR A UN CANDIDATO?:
¿LO QUE APARENTA?
(TRATA A SUS PARES DE COMPAÑEROS) AUNQUE NO CUMPLA NI LE INTERESEN LOS PRINCIPIOS FUNDACIONALES DEL PARTIDO QUE REPRESENTA,
¿O LO QUE DICE QUE VA A HACER?
AUNQUE SEPAMOS DE ANTEMANO QUE NO LO HARÁ.
¡¡Qué dilema!! ¿no?
“...¡Nada ni nadie por encima de la Patria. Sólo la Providencia de Dios prodigando sus bendiciones. Nosotros, todos unidos para amarla, para idolatrarla y para defenderla!”. (Perón)
¿Perseguía el general Perón un esquema de Estado Marxista-colectivista?
Los actuales conductores del justicialismo y su entorno, ¿qué persiguen?
¡ NO SE DISTRAIGA NI DEJEN QUE LO DISTRAIGAN POR FAVOR...!!!!
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