La Obra que salvó la vida a más de 100.000 niños y sus familias –por una falsa denuncia de abuso- la liquidan y rematan.
¿HACÍA FALTA LLEGAR A ESTO, PAÍS?
Un acto cruel y desubicado sin antecedentes en el mundo democrático. Sin pudor alguno fue publicado en la página web de Adrián Mercado, para su remate, por orden del Ministerio de Justicia, cada camita de los niños, sus cunas, sus cocinas y heladeras, los talleres de aprendizaje de carpintería, apicultura, panadería, huerta y vivero, cerámica, costura, electricidad y hasta los santos de la Capilla.
EL “INFERNO” DE CARLOTO Y CLARÍN
En la Fundación todo se iba sosteniendo a pesar de los duros golpes contra el Fundador, Padre Julio César Grassi. Allá por el 2002 Myriam Lewin inventó una denuncia de abuso (en realidad fueron 19 “casos” de los cuales solo 1 llegó a convertirse en condena en 2009 en el Tribunal 1 de Morón).
El Fiscal General de Morón Federico Nieva Woodgate dio vuelta las pruebas y en un fallo increíble condenaron injustamente al Padre Grassi a 15 años cambiándole en alegato y sentencia “el día y circunstancias de la acusación original”.
Es decir, que usaron sus propias pruebas para retorcerlas y reformular el juicio (que ya había terminado). Intentaban demostrar yendo contra las leyes del tiempo y el espacio que el padre Grassi podría volver de Almagro a Hurlingham, allí cometer un delito y volver a Recoleta en Capital Federal, todo en el lapso de una hora.
Ese fallo atravesó todas las instancias de reclamo judicial donde los jueces miraron para otro lado, hasta la Corte de Nación que se negó a tratar el tema.
En Argentina la Obra Felices los Niños dio una respuesta integral al problema de los chicos de la calle y les brindó Hogares, Centros de Día, Escuelas desde Jardín hasta Terciarios, Talleres de Capacitación Laboral, superando ¡más de 50 Obras en todo el país!, que llevó al reconocimiento nacional e internacional.
Estela Carlotto no conforme con su tarea de “encontrar a los hijos de los desaparecidos”, en 2002 comenzó una fundación para defensa de los derechos del niño CASACIDN (justo cuando acusaron al Padre Grassi) y manifestó en el programara radial del Negro Oro (Radio 10) “que con gusto se quedaría con la fundación”. Tremendo rechazo y escándalo provocó este ofrecimiento en los chicos y familiares de la Obra.
Myriam Lewin hizo febriles trámites para que el Consejo del Menor intervenga la Fundación y se la dé a Carlotto, pero Duhalde no estuvo de acuerdo. Carlotto recién en 2004 obtuvo la aprobación de su asociación a la que le puso por nombre CASACIDN, fundación que puso en manos de la mediática psicóloga Nora Schulman, quien rápidamente contrató a su marido Calcagno Quijano, con suculentos honorarios para ser querellante contra el Padre Grassi, cabe destacar que Calcagno logró un subsidio de 100.000 pesos del GCBA para dar “una charla” sobre “derechos humanos” en Santiago del Estero, dinero que nunca pudo rendir poniendo así en apuros al entonces Jefe de Gobierno Aníbal Ibarra.
De 2002 al 2004 un advenedizo abogado especialista en internet, Juan Pablo Gallego, comenzó a ser querellante contra el padre Grassi cobrando dinero de Canal 13 y también de Carlotto, representando a una asociación que aún no existía.
A partir del 2004 el CASACIDN de Carlotto dirigido por la psicóloga Schulman, comenzó sus funciones que consistieron en opinar genéricamente de los Derechos del Niño en su página de internet y ser querellantes contra el Padre Grassi.
Lo que llama la atención es que esta es la única querella que el CASACIDN hizo en su historia, es decir, que ésta institución nació para destruir al padre Grassi y a su Fundación.
Y también uno tendría que preguntarse por qué el denunciante “Gabriel”, cuyo testimonio fue inventado por Myriam Lewin en Telenoche Investiga TIENE COMO ABOGADO AL JEFE DE ASUNTOS JURÍDICOS DE CABLEVISIÓN (Grupo Clarín) DOCTOR SERGIO PIRIS. ¿Acaso Clarín se dedica a asistir jurídicamente a chicos de la calle? ¿No era que ellos simplemente tomaron objetivamente un testimonio y lo pusieron en manos de la justicia?
La respuesta es no, Clarín (en Canal 13) inventó una historia, puso un abogado para sostenerla, presionó a los jueces con advertencias televisivas y mediáticas y además se asoció a su enemiga Carlotto para poder tener la seguridad de un éxito final: el Padre Grassi no podría apoyarse ni por derecha ni por izquierda para salir airoso de esta infamia.
Un importante jurista manifestó que el sacerdote tuvo la rara virtud de poder juntar en su contra el agua y el aceite en la Argentina.
Pero volvamos al hilo de relato: los escritos de Gallego daban risa en tribunales por lo grosero y carente de contenido. Pero fue el supuesto “psiquiatra Stola” (cuyo título no aparece ni en la Facultad en la que dice haberse recibido, por lo que Stola dijo en el juicio oral que una mano negra lo hizo desaparecer).
El mismo Stola dijo en el diario de Entre Ríos (cuya nota esta como prueba en la Causa) “Con Gallego hicieron un moderno sistema de abordaje en el juicio al Padre Grassi: decía que los jueces son mediocres y que tienen miedo a los medios, afirmando que con Gallego los presionaban con los Medios de Comunicación y los Magistrados terminaban haciendo lo que ellos querían”.
Lamentablemente así se manejaron hasta llegar a la Corte de Nación, decían cualquier cosa: Gallego insultaba a cualquiera y no respetaba ningún tipo de forma judicial, solo se dedicó a presionar para que quienes con dignidad y prestigio llevan adelante una causa desistan ser justos y piensen “yo no quiero estar en la boca de este tipo”. Esta no fue idea de Gallego. Fue Carlotto quien le pidió que interpretara ese papel desestabilizante del derecho pensante para pasar a un derecho parlante e intimidante cargado de supuestos falsos muy especialmente con injurias y burlas.
PRESO GRASSI, AHORA ATAQUEMOS SU OBRA
La psicóloga Nora Schulman también por pedido de su fundadora y aportante de millonarios subsidios, Estela Carlotto, tenía que mentir sobre la Fundación en su totalidad e intentar destruirla ya que no podían quedarse con ella porque la gente no los podía ni ver. El hijo de Carlotto (Remo) encontró en Juan Manuel Casolati el instrumento para dar fin al proyecto del Padre Grassi.
Cuando el Sacerdote Fundador de Felices los Niños quedó detenido, Casolati era Defensor de Presos en San Martín. Se acercó al clérigo en la cárcel para supuestamente defenderlo de los malos tratos que éste recibía allí. Pero su plan era ganar la confianza. Paralelamente a través del CASACIDIN publicó en Página 12 en octubre de 2013 “que habiendo metido preso al Padre Grassi ahora hay que ir por la Fundación”.
Así fue que el 8 de Noviembre de dicho año un ejército de auditores desembarcó en Felices los Niños ante el asombro de los chicos y educadores: Consejo del Menor de Nación y Provincia, inspectoras de todas las escuelas y otros auditores varios de otros departamentos de estado.
Allí es donde el Padre Grassi desde la cárcel recurre (igual que Jesús al llamar a Judas) al doctor Juan Manuel Casolati, quien mostró “como que” apaciguó el ataque externo. Este tipo de mega inspecciones no se las hacían a ninguna institución, pero empezaron a pegar duro porque había otras intenciones.
Casolati asumió el rol de director de hogares de internos y en nueve meses, con un programa de Lanata, logró que Daniel Scioli (Gobernador) siga el pedido de Remo Carlotto y su madre interviniendo la Fundación.
El pretexto era que el Padre Grassi llevaba “alimentos vencidos” al penal donde estaba, ya que los presos “morían de hambre” (algunos en sentido estricto de la palabra).
La intervención parecía una medida exagerada para que castiguen, en definitiva, que el sacerdote haga “otra obra de caridad ajena al objeto fundacional” sin menoscabar para nada la alimentación de los niños de los hogares, que era abundante y de primera calidad. Pero ese era un plan maquiavélicamente llevado adelante por Carlotto, Canal 13 (Grupo Clarín) y Scioli que por motivos políticos pensó que así ganaría “la buena prensa del multimedios” (que poco tiempo después lo llevaron cerca de las rejas). Mal cálculo de Scioli. La “toma” de la Fundación se realizó simbólicamente con el descenso en helicóptero al predio de Hurlingham de Scioli y Remo Carlotto ¡mucha causalidad!
MALTRATO A LOS CHICOS Y DESVÍO DE FONDOS:
La burda gestión de Casolati fue encubierta por la asociación de Carlotto presidida por Schulman quien estaba al tanto de los horrores que comenzaron a pasar en la Fundación –gestión Casolati- y ellas lo encubrieron. Pegaban a los chicos, redujeron drásticamente la ración alimentaria, echaron a la calle a los adolescentes entre ellos uno al borde la muerte por escaras infectadas, cerraron el Hogar de protección a Madres con bebés. Al echar a una mamá poco tiempo después su marido la mató. Los edificios se venían abajo y solo se pintaban los frentes de las obras.
Casolati comenzó a recibir millonarios subsidios que desde 2006 a la Fundación se lo cortaron. Nada de ese dinero (54 millones de pesos) fue para los chicos, pero él y un pequeño grupo de directivos allegados a él, subieron sus estatus de vida de manera inusitada. No rindió un solo peso a la Provincia y menos aún hizo un balance. Cuando Scioli intervino la Fundación estando el Padre Grassi se debían 3 balances. Casolati asumió prometiendo regularizarlos. No hizo los de antes y menos los de su gestión. El ítem “robó” no lo podía poner, claro.
LEWIN MUFA
Así fueron las cosas hasta que en Junio de 2017 tenían que rendir homenaje a la iniciadora de la catástrofe con la “mentira original” Myriam Lewin. Invitó Casolati a Lewin y las cámaras de TN y Telenoche. Muy incómoda fue la presencia de quien no solo denostó al Padre Grassi sino también a la Fundación. La filmaron abrazando falsamente a los niños a los que les arruinó la vida, y la mayoría la saludó sin tener idea de quién era. Pero ella se creyó su propia infamia (casi como que Myriam Lewin es MUFA, la misma que fundió al programa Telenoche Investiga fundía hora la Fundación). Pero como el cuento de la cenicienta llegada la medianoche el carruaje de Casolati se convirtió en calabaza y Lewin en la sirvienta de Carlotto y volvió a barrer basura eclesiástica en los huestes anticlericales de Carlos D'elía en Canal 13.
CASOLATI DEJA LA FUNDACIÓN AL HORNO
En Julio de 2017 la Gobernadora María Eugenia Vidal luego de recibir aberrantes denuncias de malos tratos, abusos sexuales, un niño a punto de morir por abandono cuyas escaras hicieron descomponer a la Jueza Casaballo al ver la foto de sus estigmas provocados por la desidia del entonces usurpador de la Fundación, decidió intervenir nuevamente la Obra Felices los Niños.
El ejecutor fue el Ministro de Justicia Ferrari quien denunció a Casolati por defraudación y decidió disolver la Fundación o lo que de ella quedaba.
Esto llevó a Casolati a prisión por unos días y en la actualidad afronta en Campana un proceso por incumplimiento de los deberes de funcionario público, violación de secreto y en Morón por defraudación, violación de domicilio, robo agravado, incendio intencional, peculado, maltrato de menores (el peor de todos). Cuando una mamá le reclamó a Casolati que en el Hogar habían violado a su hija discapacitada de 15 años, éste le respondió:
-¿Usted no tiene relaciones con su marido? Es normal que eso pase.
La denuncia está en la UFI 7 de Morón.
Casolati se fue de la Fundación con las manos vacías y los bolsillos llenos. Al día siguiente inauguró un lujoso estudio jurídico en Micro Centro ¿Con qué plata?
LOCOS DE REMATE
Desde Julio de 2017 en adelante los Interventores de Felices los Niños puestos por la Dirección Provincial de Personas Jurídicas reubicaron a los niños y niñas que vivían en la Fundación y los enviaron a otros hogares. Casolati presentó un amparo para volver pero no funcionó.
Pero lo más grave es que la Intervención comenzó a trabajar desarticuladamente con la Iglesia, que por Estatuto Fundacional es la depositaria de los bienes residuales y Hogares o escuelas en funcionamiento de la Obra.
El error grave del remate es que los talleres y santos de la capilla que subastaron son para el uso de los chicos que aún quedaron de las escuelas. No puede verse tan cortamente el cumplimiento de una regla, avasallando los derechos del niño.
La escuela de la Fundación es agrícola y remataron el arado, motocultivadora, tractor y máquinas de apicultura.
Y para finalizar ¿Hacía falta rematar santos y cruz de la Capilla?: ¡Cualquier cosa! No sabemos si de esto sabía algo la gobernadora María Eugenia Vidal pero: el lote 1 del remate era la Cruz de Nuestro Señor Jesucristo, San Expedito, la Virgen María y una fila de santos que se veían “desalojados” de la Capilla y de la vista de los niños que aprendieron a invocarlos. Solo queda asumir las palabras de Jesús en la Cruz: ¡Padre perdónalos porque no saben lo que hacen!